El Toyota número 8 de Alonso, Buemi y Nakajima vuelve a ganar en el mundial de resistencia tras un par de carreras sin subirse a lo alto del podio. Lo ha hecho en las 1000 millas de Sebring (Florida), la antepenúltima carrera de este WEC.
Este triunfo supone un gran colchón de puntos sobre sus competidores del Toyota 7 hacia la consecución del campeonato del mundo, ya que Sebring, tiene una puntuación distinta a las carreras de seis horas. 32 puntos (+1 por la pole de Alonso) para el vencedor y 23 para el segundo. Tras este triunfo el Toyota del asturiano y compañía ya aventajan en 15 puntos a sus perseguidores -el otro Toyota- que en caso de no puntuar en las seis horas de Spa, y que ganase Alonso, Buemi y Nakajima, estos serían campeones del mundo.
Carrera controlada por la escudería nipón
Toyota ha demostrado estar por encima del resto en este WEC, y así lo demuestra la clasificación donde sus dos coches lideran la tabla. En Sebring no ha sido distinto. Durante las primeras horas de la carrera el Toyota 8 y 7 iban pegados. Solo les separaban unos 10 segundos. En el relevo de Alonso y Kobayashi esa diferencia pasó a 13, aumento de tiempo muy meritorio por parte de Fernando ya que el japonés hizo la vuelta rápida en ese stint.
Llegada la noche, a falta de tres horas más o menos para terminar la carrera, en el segundo relevo de Buemi (Toyota 8) y Pechito (Toyota 7), un Aston Martin tocó por la parte trasera de los segundos provocando su entrada a boxes. Este hecho dio una gran ventaja al coche del asturiano, que entró por segunda vez con varias vueltas de ventaja sobre sus compañeros.
Finalmente, y con la lluvia como aliciente en los últimos 30 minutos de carrera, el Toyota 8 se impuso al Toyota 7, lo que acerca a Alonso, Buemi y Nakajima al Título Mundial del WEC 2018/2019, que si se da la carambola puede ser en las próximas Seis horas de Spa del 4 de mayo.