La nueva generación del Peugeot 208 se presentará oficialmente en el Salón del Automóvil de Ginebra a comienzos de marzo y llegará al mercado en otoño. Cuenta con un nuevo diseño inspirado en los últimos lanzamientos de la marca, en el que destacan los distintivos grupos ópticos delanteros o la banda negra que recorre el portón del maletero uniendo los dos faros traseros, que muestran tres garras, y que ya lucen modelos como el Peugeot 3008, 5008 y 508.
El modelo se sustenta en la nueva plataforma CMP (Common Modular Platform) del Grupo PSA, estrenada hace solo unos meses por el todocamino urbano DS 3 Crossback, lo que le permite más posibilidades mecánicas y tecnológicas y también un ahorro de 30 kilos de peso. Así, abrirá la vía a la conducción semiautónoma con asistentes como el control de crucero adaptativo, asistente de mantenimiento de carril, Full Park Assist, asistente de frenada de emergencia automática con detector de peatones y ciclistas, alerta de riesgo de colisión, detector de fatiga y un largo etcétera. En el apartado de conectividad ofrecerá función Mirror Screen compatible con MirrorLink, Apple CarPlay y Android Auto y navegador TomTom Traffic 3D.
La gama se estructura en cinco niveles de acabado (Like, Active, Allure, GT Line y GT) y ofrecerá desde el principio tres tipos de propulsores: diésel, gasolina y eléctrico. En el primer caso, el BlueHDi 1.5 de 100 CV ligado a la caja manual de 6 marchas. En gasolina incorpora tres opciones PureTech con 75 CV (manual de cinco velocidades), 100 CV (manual de seis o cambio automático EAT8) y 130 CV (solo con la caja EAT8). El eléctrico se llama e-208 y estará disponible con los acabados GT (exclusivo de esta motorización) y GT Line. Equipará un propulsor de 100 kW de potencia (equivalentes a 136 CV) y su autonomía, según la nueva norma WLTP, es de 340 kilómetros.
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