Jorge Lorenzo supo esperar el momento propició para "asestar" el golpe a todos sus rivales, que se esforzaron por no tener a nadie detrás mientras que él, más calmado, dejó que todos salieran a pista para entrar en solitario y en una vuelta completamente "limpia" de rivales, marcar 1:46.881, su cuarta mejor clasificación de la temporada tras las de Cataluña, Inglaterra, San Marino y Aragón y la sexagésimo novena de su carrera deportiva.
Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V), líder del mundial de MotoGP, tercero, no comenzó demasiado bien la fase clasificatoria ya que en los últimos libres, los cuartos, en los que se ultiman todos los pequeños detalles, sufrió una fuerte caída en la curva siete.
Márquez no sufrió daños en su integridad física, salvo un fuerte "arrastrón" visible en el mono de cuero, pero que dejó su moto seriamente dañada y, con ello, condicionó su rendimiento en la segunda clasificación, que comenzó con una sola moto.
Antes, en la primera clasificación, los pilotos oficiales de Yamaha, Valentino Rossi y Maverick Viñales, saltaron al asfalto con la responsabilidad de intentar acceder a la segunda clasificación y el español logró ya en la segunda vuelta un registro de 1:47.823 que le daba el pase a la misma, no así al italiano, que con 1:48.627 era quinto y debía mejorar.
Rossi lo intentó todo, incluso esperar a otros rivales para intentar seguir su rebufo, pero el italiano no pudo pasar de la octava posición, a más de ocho décimas de segundo del mejor de la primera clasificación, su compañero de equipo Maverick Viñales, que logró el pase a la siguiente clasificación junto al japonés Takaaki Nakagami (Honda RC 213 V), quien protagonizó su mejor tiempo en la última vuelta.
Ya desde antes de comenzar la segunda clasificación se pudo comprobar que Marc Márquez sólo iba a disponer de una moto, con la segunda Repsol Honda, la del accidente de los cuartos libres, tapada con una funda azul, pero sin ningún atisbo de duda el líder del mundial fue de los primeros en salir a pista.
Y lo hizo además con las ganas de sentenciar cuanto antes la clasificación, por lo que incluso con el italiano Andrea Iannone (Suzuki GSX RR) por delante, molestando, no se cortó ni un pelo a la hora de superarlo con una espectacular derrapada posterior para marcar la primera vuelta rápida en 1:46.974, tiempo con el que se quedaba a poco más de tres décimas de segundo del récord absoluto del circuito, que él mismo tiene desde 2015 en 1:46.635.
Tras Márquez se situó un Jorge Lorenzo (Ducati Desmosedici GP18), que aguantó el máximo posible en su taller antes de salir y cuando lo hizo fue para ser segundo, con 1:47.084 en su segunda vuelta, mientras que el de Repsol Honda, en la tercera vuelta, volvió a bajar su registro a 1:46.960.
Nuevo paso por los talleres para hacer el segundo y definitivo asalto con Márquez líder, por delante de Jorge Lorenzo, Cal Crutchlow (Honda RC 213 V), quien poco después se cayó en la curva dos, y Andrea Dovizioso (Ducati Desmosedici GP18), con Dani Pedrosa (Repsol Honda RC 213 V) en la séptima plaza, Álvaro Bautista (Ducati Desmosedici GP17), octavo, Maverick Viñales décimo, y Alex Rins (Suzuki GSX RR), undécimo.
La última salida fue una auténtica guerra de estrategias en la que casi todos los pilotos buscaron a algún rival pero ya sin tiempo material en pista Andrea Dovizioso debía tirar estuviese quien estuviese detrás, como también Marc Márquez, a quien se "enganchó" el italiano Andrea Iannone.
Así, la última vuelta se convirtió en un guerra de nervios en la que el primer beneficiado fue Andrea Dovizioso, que se puso líder con 1:46.895 para desbancar al piloto de Repsol Honda, y por detrás de ambos entró Jorge Lorenzo, el único que consiguió rodar en solitario para lograr un 1:46.881 que le confirmó en la mejor posición de la formación de salida, aunque fuese con catorce milésimas sobre Dovizioso y 79 respecto a Márquez.
Dani Pedrosa (Repsol Honda RC 213 V) acabó en la sexta posición, Álvaro Bautista octavo, Alex Rins noveno y Maverick Viñales en la undécima posición, a casi un segundo del piloto de Ducati.