Tras el Sportage y el Picanto, el Kia Rio es el tercer modelo de la gama de la marca en recibir la deportiva versión GT-Line. Se presentará en marzo, en el Salón del Automóvil de Ginebra, la gran cita europea del motor, y llegará a finales del primer semestre al mercado. Está inspirada en otras variantes GT de Kia, como el Cee'd GT o el Optima GT.
Este Kia Rio GT Line llega equipado con el motor T-GDi de 1,0 litros y 120 caballos de potencia, que se combina con una caja de cambios manual de seis velocidades y con el que consume 4,7 l/100 km. Está previsto que durante el tercer trimestre del año el Rio GT-Line pueda contar con motores atmosféricos de gasolina MPI (inyección multipunto) de 1,2 litros así como con una caja de cambios de siete velocidades y doble embrague.
En el aspecto exterior, la deportividad se realza con detalles como la parrilla con acabado cromado y negro brillante, unas llantas de aleación exclusivas de 17 pulgadas y luces de niebla de LED que recuerdan a las del Cee'd GT y el Pro_cee'd GT. En el exterior también destacan las dos salidas de escape traseras, las luces diurnas LED, los marcos cromados en las ventanillas o un spoiler negro brillante. Ya dentro, encontramos asientos tapizados en cuero sintético negro con costuras de contraste grises, volante de cuero o remates metálicos en la palanca de cambios y el salpicadero, todo completado con un nuevo acabado de efecto fibra de carbono.
Además, el Kia Rio cuenta con una gran dotación tecnológica, entre la que se encuentran dispositivos de seguridad como el sistema de detección de la atención del conductor y aviso por cambio involuntario de carril.