Jaguar ha tardado en apuntarse a la moda de los SUV y crossover, pero visto el éxito que ha cosechado con el F-Pace, su primer todocamino, no ha tardado en ampliar horizontes con este E-Pace, un escalón por debajo en tamaño –mide 4,39 metros, 34 centímetros menos que el F-Pace–. Con él van a dar la batalla a modelos de tanto éxito comercial como el Audi Q3, Mercedes GLA, Range Rover Evoque o el nuevo Volvo XC40.
Y para lograrlo incorporan en el E-Pace, que ya hemos podido conducir en Córcega, las más avanzadas tecnologías. La gama mecánica está formada por motores de cuatro cilindros, de la familia Ingenium. Todos cuentan con un bloque de dos litros de cilindrada, tres de ellos son diésel y dos de gasolina. Las potencias oscilan entre 150 y 300 caballos y pueden contar con cambio manual de 6 velocidades o automático de 8. La tracción puede ser delantera o total. Y para realzar el carácter deportivo del E-Pace, en Jaguar ofrecen un acabado R-Dynamic con paragolpes deportivos, parrilla delantera en acabado Gloss Black, detalles en Satin Chrome, además de que en su interior cuenta con asientos deportivos, levas en el volante asociadas al cambio automático y pedales metálicos.
Para el lanzamiento, la marca británica ha previsto unas versiones especiales, First Edition, para los D180 y P250, siempre con cambio automático y tracción total. Cuentan con un exclusivo color exterior Caldera Red, las llantas de 20 pulgadas, el techo panorámico fijo, sin olvidar detalles como las luces de carretera automáticas, iluminación ambiental, reparto de par en curva TVBB, sistema All Surfaces Progress Control, sistema de navegación Pro, aparcamiento asistido, acceso sin llave, Activity Key y mucho más. Y los precios del nuevo E-Pace oscilan entre 37.450 y 69.850 euros.