La organización del Rally Dakar ha decidido dar la victoria de la segunda etapa al piloto español Carlos Sainz (Buggy) tras haber detectado interferencias entre los satélites y el GPS que utiliza en su vehículo. Este sistema es entregado a cada participante por la organización, por lo que la responsabilidad del error no fue del equipo.
El director de carrera, Francis Murac, decidió restar 21 minutos y 26 segundos del tiempo final a Sainz. De esta manera el piloto madrileño gana la segunda etapa y tras su victoria el día anterior, recupera la primera posición en la clasificación general aventajando en 5:05 minutos al segundo clasificado, el francés Stephane Peterhansel (Mini). El sudafricano Giniel de Villiers (Toyota) es tercero a 7:43.
Carlos Sainz relataba lo acontecido en la prueba con estas palabras: "Lo que nos pasó en la etapa de ayer fue muy extraño. Un white point (punto de control) lo llegamos a pasar tres o cuatro veces antes de continuar adelante. Íbamos para arriba, para abajo y dando vueltas y más vueltas porque sabíamos que estábamos en el lugar correcto. Al final decidimos seguir adelante con la etapa porque no podíamos encontrar ese punto de control".
"Fue una decisión arriesgada", continuaba reltando Sainz, "porque si no pasas por todos los puntos de la ruta en la etapa te puede costar una importante penalización de tiempo. Cuando seguimos adelante, a unos tres kilómetros, nos dio la confirmación de haber pasado por allí"
Cuando llegó a Pisco (Perú), el piloto presentó una reclamación a la dirección de la carrera por el mal funcionamiento del sistema de navegación que le había sido proporcionado. Tras ser analizado por el comité responsable, se decidió cambiar los tiempos finales, siendo concedida de esta forma la primera posición para Sainz.