El tetracampeón mundial de MotoGP es el rey de las salvadas, y este viernes, en la primera sesión libres del GP de Holanda en Assen, ha vuelto a demostrarlo mientras rodaba a más de 180 km/h.
Al madrileño, que se impuso a Bezzecchi por 19 milésimas, le impactó una piedra en la cúpula de su Honda. Luego esquivó de milagro a una liebre que se cruzó en su camino.