El español Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) ha reconocido en Assen, escenario el próximo sábado del Gran Premio de Holanda de MotoGP, que si sufriese de nuevo una caída y se fracturase una clavícula no cree que volviese a competir pocas horas después, como hizo el año pasado, "porque el título está casi imposible".
Lorenzo se fracturó en 2013 una clavícula durante los entrenamientos libres del GP de Holanda y se fue a Barcelona para operarse y regresar 35 horas más tarde para disputar la carrera.
"Sería una locura. El año pasado ya era bastante locura porque me arriesgaba a tener una nueva caída y verdaderamente a hacerme mucho daño, pero entonces luchaba por el título. Estaba a muy pocos puntos de Dani (Pedrosa) o no sé si estaba primero y era como un castigo por el error hecho, pero también por perder los menos puntos posibles", reconocía Lorenzo.
"Fue una carrera muy emocionante, quizás la carrera más emocionante que he podido acabar en mi vida. Sabía que hacer quinto en MotoGP en condiciones normales es dificilísimo, pero hacerlo 30 horas después de la operación era algo imposible o impensable unas horas antes, pero lo pude conseguir, quizás era el circuito ideal para intentar esa proeza", asegura el piloto de Yamaha, quien ha dicho que la moto mejoró en lo que a electrónica se refiere tras las pruebas de Aragón.
Sobre la renovación de su contrato, Jorge Lorenzo asegura que "como siempre, hay diferencias entre el equipo y el deportista y hasta que se pulan esas diferencias, si se pulen, pues no se llega a un acuerdo". "Siempre pasa lo mismo y a veces se llega a un acuerdo pronto y a veces se tarda más. O a veces no se llega, depende de cada negociación", señala Lorenzo, que aclara que las diferencias "en este caso son económicas".
