No hay quien pueda con Marc Márquez. En su segundo año en el Mundial de MotoGP, el piloto de Repsol Honda es el máximo favorito para revalidar el título que conquistó el año pasado en la categoría reina, entonces con 20 años.
El catalán comenzó el curso de la mejor manera posible, con un triunfo en la carrera nocturna de Losail (Qatar), y este domingo, en la segunda prueba de la temporada, sencillamente no tuvo rival en el Gran Premio de Las Américas en Austin (Texas), su circuito talismán.
Márquez dominó el fin de semana de principio a fin, marcando el mejor tiempo en las cuatro tandas de entrenamientos libres, en la Q2 y en la carrera del domingo. Y en la cita del domingo por la tarde, a la hora de la verdad, fue el más rápido en entrar en la meta con una ventaja de más de cuatro segundos sobre el segundo clasificado, su compañero de equipo Dani Pedrosa, y de casi 21 sobre el tercero, el italiano Andrea Dovizioso (Ducati).
"Sé que ha sido una carrera aburrida para el aficionado. Espero que no hayan muchas así porque para mí también me ha costado mantener la concentración", decía un Márquez pletórico, que con su victoria en Austin ha igualado el inicio de temporada que el mítico Mick Doohan firmó en 1995, cuando ganó las dos primeras citas del curso (Australia y Malasia) desde la pole position.
Y la celebración del joven piloto de Cervera, que el pasado 17 de febrero cumplió 21 años, ha sido por todo lo alto, rodeándose de las chicas del paddock del Circuito de Las Américas, cuyo patrocinador principal es Red Bull.
"El secreto de un campeón reside en rodearse de un buen equipo. Y @MarcMarquez93 lo sabe", escribe la empresa de las bebidas energéticas en su cuenta oficial en Twitter.
A Marc se le ve eufórico, y no es para menos. La próxima cita es dentro en Argentina, concretamente en el Autódromo Provincial Termas de Río Hondo (a las afueras de San Miguel de Tucumán, al norte del país). Aún quedan dos semanas, pero el resto del paddock ya puede echarse a temblar...