La niebla sobre el circuito de Motegi ha obligado a suspender la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Japón, penúltima prueba de la temporada del Mundial de MotoGP.
El motivo no es la visibilidad sobre la pista y entre los pilotos, sino que el helicóptero médico que tenía que volar desde un hospital de la ciudad de Utsunomiya, cercana a Tokio, no ha podido desplazarse a Motegi por la niebla.
Además, la lluvia no ha dejado de caer sobre la pista de Motegi a lo largo del día, aunque ésta no fue el motivo de la cancelación de las dos sesiones de entrenamientos libres en cada una de las categorías del Mundial de MotoGP. Ni una sola moto salió de los garajes.
Las previsiones meteorológicas para el sábado son peores. Eso ha llevado a los pilotos y a la dirección de Carrera a contemplar la posibilidad de que el domingo se dispute, en el caso de otra suspensión mañana, una tanda de entrenamientos y la carrera.
La cercanía del tifón Francisco crea todavía mayor incertidumbre sobre el Gran Premio de Japón, penúltimo de la temporada y en el que tres españoles, Marc Márquez (Repsol Honda), Jorge Lorenzo (Yamaha) y Dani Pedrosa (Repsol Honda), se jugarán parte de sus posibilidades de ganar el título de MotogGP el domingo.
En Moto2 también en Motegi se puede dilucidar el campeonato entre los españoles Pol Espargaró (Kalex) y Tito Rabat (Kalex) y el británico Scott Redding (Kalex).