El español Marc Márquez (Honda) logró su segunda victoria de la temporada en el Gran Premio de Alemania de MotoGP disputado en Sachsenring, que además le dio el liderato en la clasificación provisional del mundial por apenas dos puntos de ventaja sobre su compañero Dani Pedrosa.
La segunda victoria de Marc Márquez llega, además, en un circuito en el que tiene una excepcional estadística, puesto que en los últimos cuatro años todas sus apariciones se cuentan por victorias ya que ganó en 2010 la prueba de 125 c.c. y en 2011 y 2012 hizo lo propio en Moto2, para sumar ahora el triunfo inapelable en MotoGP.
La carrera alemana ya comenzó con unas bajas de relevancia puesto que el campeón del mundo Jorge Lorenzo (Yamaha) se fue al suelo en los segundos entrenamientos libres y la placa que le había colocado en la clavícula se dobló, lo que le obligó a regresar a España, esta vez para no volver como en Holanda, y guardar reposo tras una nueva intervención quirúrgica hasta el Gran Premio de Indianápolis, a mediados de agosto.
Al día siguiente, en los terceros libres, se produjo una nueva noticia que lamentar, la caída de Dani Pedrosa (Honda), que le produjo un traumatismo craneoencefálico que a la postre le acabó mermando para la carrera alemana, aunque hasta el último momento intentó correrla, pero los mareos y una baja presión sanguínea no lo hicieron recomendable.
No fueron las únicas bajas, ya que a ellos se unió el italiano Andrea Iannone (Ducati), con una luxación de hombro que le obligó a causar también baja.
Para romper el ritmo de su rival, el italiano Valentino Rossi (Yamaha) salió como un auténtico misil para ponerse al frente de la carrera secundado por el alemán Stefan Bradl (Honda), quien antes de cumplirse la primera vuelta ya se había puesto líder.
Tras ellos, un sorprendente Aleix Espargaró (ART), que salía desde la segunda línea con el quinto mejor tiempo, se colocó en una espectacular cuarta tercera posición, por delante de Marc Márquez (Honda), que se lo tomó con cierta calma en las vueltas iniciales, como también el británico Cal Crutchlow (Yamaha), quien se colocó cuarto en esa misma vuelta.
Bradl marcó su primera vuelta rápida en el segundo giro, el mismo en el que lo hizo el español Álvaro Bautista (Honda ), por entonces quinto, pero la situación fue poco a poco aclarándose y delante acabaron los aspirantes al podio ya que a Bradl, Rossi y Márquez, que dio buena cuenta de Aleix Espargaró, se les unió poco después Cal Crutchlow.
En apenas dos vueltas más Marc Márquez, a ritmo de vuelta rápida, ya estaba en cabeza de la carrera, mientras que Stefan Bradl se defendía como podía de los ataques de Valentino Rossi, que lo adelantó en la novena vuelta, y de Cal Crutchlow, que lo hizo en la siguiente.
Con Márquez en cabeza, la situación cambió radicalmente pues el piloto de la escuadra Repsol cambió el ritmo y en apenas dos giros ya tenía un hueco de más de un segundo de ventaja, pero todavía con veinte vueltas por delante.
Aún a pesar de su buena actuación, Aleix Espargaró vio como poco a poco las más potentes MotoGP le iban alcanzando y le superaban para ir haciéndole perder posiciones hasta concluir la prueba en octava posición, después de una intensa pelea con el italiano Andrea Dovizioso, al manillar de una de las Ducati Desmosedici oficiales de la fábrica de Borgo Panigale.
En el ecuador de la carrera, el decimoquinto giro, y por si no quedaba claro, Marc Márquez protagonizó una nueva vuelta rápida casi en el mismo instante en el que Crutchlow, con las secuelas de su fuerte caída de entrenamientos todavía muy frescas, superaba a Rossi y comenzaba a marcharse de él.
Allí se acabó la carrera, Márquez abrió un hueco definitivo que supo mantener hasta la bajada de la bandera de cuadros, al igual que Crutchlow hizo lo propio respecto a Rossi y aunque por momentos pareció que podía cazar al español, no fue así.
La cuarta plaza fue para el alemán Stefan Bradl por delante del español Álvaro Bautista (Honda RC 213 V), con Aleix Espargaró (ART), octavo y Héctor Barberá (FTR) en la undécima plaza.
