L D (Agencias) La victoria permite a los Miami Heat mantenerse invictos en lo que va de la fase final del campeonato y tener la ventaja de 2-0 en la serie que disputan al mejor de siete partidos y que se traslada al MCI de Washington, donde se jugará el tercero el próximo jueves. De nuevo Dwyane Wade confirmó que es el líder indiscutible en el ataque de los Heat y lo demostró al anotar 10 de 15 tiros de campo para encabezar a los cinco titulares que anotaron el doble dígitos y dieron a su equipo un 57,6 por ciento de acierto en los tiros de campo (38 de 66) y un 43,5 en los triples (10 de 23).
Wade, que estableció nueva marca de equipo en asistencia para un partido de la fase final, en los 40 minutos que estuvo en el campo aportó en todos los apartados del juego al recuperar tres balones y poner dos tapones, que fueron de gran ayuda para la defensa. Sin embargo, los Heat también dejaron claro que son el equipo con el peor porcentaje en los tiros de personales al fallar 18 de los 40 tiros que hicieron para quedarse con un 55,0 por ciento de acierto.
Esos fallos fueron los que hicieron posible que los Wizards surgiesen en el último cuarto para darle mayor emoción a un partido que siempre estuvo bajo control de los Heat, que llegaron a tener una ventaja de 14 puntos. El veterano alero Eddie Jones estuvo imparable con los triples al anotar 5 de 9 y aportar 21 puntos, mientras que el alero Udonis Haslem iba a convertirse en el factor sorpresa después de la gran labor que hizo bajo los aros al capturar 13 rebotes y encestar 14 tantos. Los reservas también hicieron su trabajo y dieron 12 puntos a los Heat, que vieron como su jugador estrella, el pívot Shaquille O'Neal sigue sin jugar su mejor baloncesto y ser el hombre alto más dominante que hay en la NBA.
Tal vez por primera vez en su carrera profesional, O'Neal siente que detrás hay un equipo de verdad y no tiene porque ir al máximo en todos los partidos e hizo una aportación discreta de 16 puntos, siete rebotes, dos asistencias y puso dos tapones. Mientras, los Wizards, como había anticipado su entrenador Eddie Jordan, iban a salir al campo y a luchar y a demostrar que pueden hacer bien las cosas y ganar a cualquier rival.
Wade, que estableció nueva marca de equipo en asistencia para un partido de la fase final, en los 40 minutos que estuvo en el campo aportó en todos los apartados del juego al recuperar tres balones y poner dos tapones, que fueron de gran ayuda para la defensa. Sin embargo, los Heat también dejaron claro que son el equipo con el peor porcentaje en los tiros de personales al fallar 18 de los 40 tiros que hicieron para quedarse con un 55,0 por ciento de acierto.
Esos fallos fueron los que hicieron posible que los Wizards surgiesen en el último cuarto para darle mayor emoción a un partido que siempre estuvo bajo control de los Heat, que llegaron a tener una ventaja de 14 puntos. El veterano alero Eddie Jones estuvo imparable con los triples al anotar 5 de 9 y aportar 21 puntos, mientras que el alero Udonis Haslem iba a convertirse en el factor sorpresa después de la gran labor que hizo bajo los aros al capturar 13 rebotes y encestar 14 tantos. Los reservas también hicieron su trabajo y dieron 12 puntos a los Heat, que vieron como su jugador estrella, el pívot Shaquille O'Neal sigue sin jugar su mejor baloncesto y ser el hombre alto más dominante que hay en la NBA.
Tal vez por primera vez en su carrera profesional, O'Neal siente que detrás hay un equipo de verdad y no tiene porque ir al máximo en todos los partidos e hizo una aportación discreta de 16 puntos, siete rebotes, dos asistencias y puso dos tapones. Mientras, los Wizards, como había anticipado su entrenador Eddie Jordan, iban a salir al campo y a luchar y a demostrar que pueden hacer bien las cosas y ganar a cualquier rival.
San Antonio vence sin problema a Seattle (2-0)
La máquina de hacer baloncesto en la que se ha convertido el trío formado por Emanuel Ginóbili, Tim Duncan y Tony Parker alcanzó de nuevo su mejor producción y el resultado fue un triunfo cómodo por 108-91 ante los SuperSonics de Seattle en el segundo partido de la eliminatoria de semifinales de la Conferencia Oeste. Nada cambió con relación al primer partido y los Spurs fueron siempre muy superiores en todos los aspectos del juego, tanto colectivo como individual para ponerse con la ventaja de 2-0 en la serie que disputan al mejor de siete y que se traslada al Key Arena de Seattle, donde se jugará el tercero el próximo jueves.
El trío de figuras de los Spurs se combinaron darle a su equipo la producción de 75 puntos y dejar a su equipo con un 52,8 por ciento de acierto en los tiros de campo; el 38,5 en los triples y el 77,1 desde la línea de personal. El argentino Ginóbili, que volvió a salir como Sexto Jugador, estuvo intratable en la primera parte y el cuarto periodo para ser el motor de los Spurs que encabezó el ataque al conseguir 28 puntos después de 31 minutos de acción y anotar 9 de 11 tiros de campo, incluidos 2 de 4 triples y 8 de 10 desde la línea de personal.
Con Ginóbili en plan estrella, Duncan no quiso quedarse atrás y aportó 25 puntos, con nueve rebotes y tres tapones, mientras que Parker completó a sus compañeros al conseguir 22 tantos. Si las figuras del equipo cumplieron con su responsabilidad, el pívot Nazr Mohammed, cada vez más seguro en su puesto de titular, aportó siete puntos con 10 rebotes. La defensa de los Spurs volvió a ser factor en el triunfo del equipo al forzar 16 perdidas de balón de los SuperSonics por tan sólo 11 del equipo tejano, que tiene marca de 6-1 en lo que va de la competición de la fase final del campeonato después de ganar 4-1 a los Nuggets de Denver en la primera eliminatoria.
Ante este aluvión de buen juego y efectividad encestadora, los SuperSonics sólo pudieron presentar una vez más al escolta Ray Allen, que al final pudo jugar sin mayor molestias en su tobillo lesionado, para conseguir 25 puntos, mientras que el alero Rashard Lewis lo apoyo con 22 tantos y siete rebotes.
El Antonio Daniels hizo su trabajo al aportar 16 puntos para ser el tercer jugador que logró doble dígitos en el ataque de los Supersonics, que se quedaron con un 42,3 por ciento de acierto en los tiros de campo y el 87,5 desde la línea de personal. "Volvieron a ser superiores en el juego de conjunto y en las individualidades", comentó Nate McMillan, entrenador de los SuperSonics. "Ellos hicieron el trabajo en su campo y ahora nos toco a nosotros en el nuestro". McMillan reconoció que la clave de la eliminatoria estará en el tercer partido, cuando su equipo necesita la victoria para evitar que los Spurs consoliden su ventaja.
El trío de figuras de los Spurs se combinaron darle a su equipo la producción de 75 puntos y dejar a su equipo con un 52,8 por ciento de acierto en los tiros de campo; el 38,5 en los triples y el 77,1 desde la línea de personal. El argentino Ginóbili, que volvió a salir como Sexto Jugador, estuvo intratable en la primera parte y el cuarto periodo para ser el motor de los Spurs que encabezó el ataque al conseguir 28 puntos después de 31 minutos de acción y anotar 9 de 11 tiros de campo, incluidos 2 de 4 triples y 8 de 10 desde la línea de personal.
Con Ginóbili en plan estrella, Duncan no quiso quedarse atrás y aportó 25 puntos, con nueve rebotes y tres tapones, mientras que Parker completó a sus compañeros al conseguir 22 tantos. Si las figuras del equipo cumplieron con su responsabilidad, el pívot Nazr Mohammed, cada vez más seguro en su puesto de titular, aportó siete puntos con 10 rebotes. La defensa de los Spurs volvió a ser factor en el triunfo del equipo al forzar 16 perdidas de balón de los SuperSonics por tan sólo 11 del equipo tejano, que tiene marca de 6-1 en lo que va de la competición de la fase final del campeonato después de ganar 4-1 a los Nuggets de Denver en la primera eliminatoria.
Ante este aluvión de buen juego y efectividad encestadora, los SuperSonics sólo pudieron presentar una vez más al escolta Ray Allen, que al final pudo jugar sin mayor molestias en su tobillo lesionado, para conseguir 25 puntos, mientras que el alero Rashard Lewis lo apoyo con 22 tantos y siete rebotes.
El Antonio Daniels hizo su trabajo al aportar 16 puntos para ser el tercer jugador que logró doble dígitos en el ataque de los Supersonics, que se quedaron con un 42,3 por ciento de acierto en los tiros de campo y el 87,5 desde la línea de personal. "Volvieron a ser superiores en el juego de conjunto y en las individualidades", comentó Nate McMillan, entrenador de los SuperSonics. "Ellos hicieron el trabajo en su campo y ahora nos toco a nosotros en el nuestro". McMillan reconoció que la clave de la eliminatoria estará en el tercer partido, cuando su equipo necesita la victoria para evitar que los Spurs consoliden su ventaja.