México sigue sorprendiendo y Argentina se lleva el duelo con Canadá

L D (EFE) El equipo mexicano se apoyó en los últimos minutos del partido en la eficacia de Eduardo Nájera, cuyas canastas resultaron decisivas en los minutos finales para afianzar la supremacía de México hasta el pitido final. Los uruguayos, que se jugaban en este partido gran parte de sus aspiraciones de superar la primera fase, plantearon un partido serio que les llevó a emparejarse con su rival en el primer cuarto e, incluso, a disfrutar de alguna que otra ventaja en el marcador.

Otro partido que resultó tremendamente igualado fue el que disputaron Argentina y Canadá, duelo que finalmente se decantó del lado de los primeros por un ajustado 94-90. En los dos primeros cuartos fueron los argentinos los que sacaron más provecho de la situación y se mantuvieron por delante en el marcador. Sin embargo, en el tercer cuarto Canadá comenzó con su festival de triples que, aunque lo intentó, no pudo ser contrarrestado por los argentinos. Tal vez por que vieron el triunfo al alcance de las manos, los canadienses fueron presa de los nervios y cometieron varias faltas personales, algunas de propio Guarasci, que los argentinos aprovecharon desde la línea de personal para hacerse con su segunda victoria del torneo.

En el grupo B la República Dominicana logró su segundo triunfo y dio un paso de gigante hacia la clasificación al vencer a la supuesta cenicienta del grupo Islas Vírgenes que, pese a perder por segunda vez, volvió a dar una gran imagen por la entrega y garra de sus jugadores. Los dominicanos sufrieron para obtener el triunfo, pues Islas Vírgenes, pese a sus errores en ataque, se las arreglaron para mantenerse a la par que su rival e, incluso, ponerse por delante en el marcador en muchas fases del encuentro.

En el último partido de la jornada el equipo de Estados Unidos sumó una nueva victoria a su ya amplio casillero de triunfos al vencer a Venezuela por 98-69. Los venezolanos, pese a todo, intentaron el milagro en la primera parte del compromiso con una fuerte defensa que provocó los fallos estadounidenses. Sin embargo, estos no tardaron en tomar las riendas del enfrentamientos y en cuanto de lo propusieron se marcharon definitivamente en el marcador para obtener su tercer triunfo.