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Mauresmo y Henin-Hardenne reeditarán en Wimbledon la final del último Abierto de Australia

La tenista francesa Amelie Mauresmo, número uno del mundo, se ha clasificado para la final femenina del torneo de Wimbledon tras batir a la rusa Maria Sharapova, cuarta favorita, por 6-3, 3-6 y 6-2. Mauresmo luchará por el título frente a la tercera cabeza de serie, la belga Justin Henin-Hardenne, que se ha impuesto a su compatriota Kim Clijsters, número dos del mundo, por 6-4 y 7-6 (7-4). Ambas reeditarán ahora la final que protagonizaron hace seis meses en el Abierto de Australia.

La tenista francesa Amelie Mauresmo, número uno del mundo, se ha clasificado para la final femenina del torneo de Wimbledon tras batir a la rusa Maria Sharapova, cuarta favorita, por 6-3, 3-6 y 6-2. Mauresmo luchará por el título frente a la tercera cabeza de serie, la belga Justin Henin-Hardenne, que se ha impuesto a su compatriota Kim Clijsters, número dos del mundo, por 6-4 y 7-6 (7-4). Ambas reeditarán ahora la final que protagonizaron hace seis meses en el Abierto de Australia.

L D (Agencias) En el duelo que abría la jornada de la pista central y en el enésimo enfrentamiento entre las dos mejores jugadoras belgas del circuito, fue Henin-Hardenne quien decantó la balanza de enfrentamientos particulares con Clijsters a su favor, con el 12-10 que la preside ahora, tras imponerse en cuatro de los últimos cinco choques disputados, incluidos los cruces en las semifinales de los tres grandes del año.

El juego más agresivo de Henin, con 21 acercamientos a la red y un 81 por ciento de puntos ganados, sobre las diez subidas de su rival, así como la falta de seguridad de Clijsters en su primer servicio, con el que sólo ganó el 57 por ciento de sus puntos, ayudaron a que el primer set se decantara rápidamente, en 37 minutos, a favor de la número tres del mundo.
 
Posteriormente, pese a una tímida reacción de la cabeza de serie número dos del torneo, la vigente triple campeona de Roland Garros no dejó escapar el partido en el tie-break y apunta ahora al único de los grandes torneos que falta en su currículo, tras haberse coronado ya en Sydney, París y Nueva York.
 
Mauresmo impide a Sharapova jugar su segunda final
 
En la otra parte del cuadro, Amelie Mauresmo hizo lo propio ante Maria Sharapova, la única de las cuatro semifinalistas que ya se había proclamado campeona en el All England Club, tras ganar en 2004. El primer enfrentamiento de ambas tenistas en hierba, tras las dos victorias anteriores de la gala en pista dura, comenzó muy igualado, con dos tenistas que se respetaban y no eran capaces de romper el saque de su rival, con estadísticas muy igualadas en puntos directos, aproximaciones a la red y golpes ganadores.
 
No obstante, el break conseguido por Mauresmo en el octavo juego la lanzó, con 5-3 en el marcador, hacia el triunfo en la primera manga. A partir de ahí, el saque pareció perder su relevancia y entre constantes rupturas de servicio por las dos partes se llegó a la victoria de la rusa en el segundo set, en su afán por darse otro baño de gloria en Wimbledon, único grande que adorna su palmarés.

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