El genio de Alejandro Davidovich, que ha embrujado durante el presente Roland Garros, no fue suficiente para doblegar al alemán Alexander Zverev, sexta raqueta del mundo, que le venció en cuartos de final por 6-4, 6-1 y 6-1 en una hora y 36 minutos.
Era ambiciosa la gesta que pretendía el malagueño, acceder por vez primera en su carrera a las semifinales de un Grand Slam y hacerlo ante uno de los tenistas más en forma del momento.
Su intentona duró un set, luego se diluyó ante el empuje del alemán, que juega por tercera vez unos cuartos en París y se clasificó por vez primera para unas semifinales.
Su rival por un puesto en la final saldrá del duelo entre el ruso Daniil Medvedev, segundo del mundo, y el griego Stefanos Tsitsipas, quinto.