Gales se lleva su segundo campeonato en tres años después de que Francia, que hace unos días le negara el Grand Slam en el último instante de su enfrentamiento directo, cayera ante Escocia en París. Les Bleus han vuelto a rozar con los dedos un Seis Naciones que se les resiste desde 2010, y ha sido otra vez Escocia la selección que les ha privado de una victoria a la que han optado hasta el último partido del torneo.
Para llevarse un campeonato que hoy celebra su 150 aniversario (Escocia e Inglaterra disputaron el primer partido internacional, origen del actual Seis Naciones, el 27 de marzo de 1871 en Edimburgo), el XV del Gallo debía imponerse al del Cardo con bonus ofensivo y por más de 21 puntos en el partido aplazado disputado en un Saint-Denis una vez más escenario de un final caótico, en el que un ensayo de Duhan van der Merwe en el último instante dio a Escocia su primera victoria en París desde 1999. Es decir, la primera tras la inclusión de Italia.
Gales supo aprovechar sus oportunidades
Después de una edición de 2020 en la que sólo consiguió una victoria –ante Italia, obviamente–, Gales mostró una mejor versión este año y, sobre todo, una capacidad superior a la de sus rivales para aprovechar las oportunidades. Las dos sufridas remontadas ante una Irlanda, que jugó con 14 hombres durante tres cuartas partes del partido (21-16), y Escocia (24-25) con las que comenzó el torneo aportaron un estado anímico al grupo que le ayudó a vencer a Inglaterra (40-24) en el fin de semana central. A partir de ahí, el trámite frente a Italia (7-48), y el partido por el Grand Slam en el Estadio de Francia, que acabó siendo el mejor de esta edición y que, de no haber concluido como lo hizo (32-30), hubiese ampliado el récord galés de cuatro a cinco victorias en el campeonato sin ser derrotada.
Como consuelo, apenas una semana más tarde, el XV del Dragón celebra el título en casa (su sexta copa, sólo por detrás de Inglaterra, con siete). Una victoria trabajada en una edición atípica de un torneo de ritos y tradiciones que, con los estadios vacíos, con las selecciones viajando, pero sin naciones acompañándolas, bien podría llamarse temporalmente Seis Equipos.
Inglaterra iguala su peor clasificación
En contraste con la efectividad galesa, el periplo nefasto de Inglaterra: de campeona el año pasado, al quinto puesto en 2021, sólo por encima de Italia, igualando su resultado de 2018. El XV de la Rosa, que mostró signos de recuperación contra Francia en la cuarta jornada, cayó con claridad frente Irlanda hace una semana, como lo hizo al principio del campeonato ante Escocia y Gales, condenado por las constantes faltas de disciplina de sus delanteros.
Tras la derrota en Dublín, los de Eddie Jones terminaron el Seis Naciones con una cantidad récord de 67 golpes de castigo en cinco partidos, igualando la cifra anterior establecida por Italia, casualmente unas horas antes.