La vida da muchas vueltas y, si no, que le pregunten a Verona Van de Leur. Esta exgimnasta holandesa (Gouda, 27 de diciembre de 1985) tuvo una destacada carrera como deportista, ya que terminó siendo subcampeona de Europa en Patras 2002 (Grecia) en el concurso completo individual, sólo por detrás de toda una leyenda de la gimnasia como lo fue la rusa Svetlana Khorkina.
En tierras helenas ganó Verona dos medallas de plata y otras dos de bronce, lo que le llevó a ganar el premio de mejor deportista del año de Holanda.
Sin embargo, la carrera de Van de Leur se truncó en 2008: dejó el deporte y se encontró sin recursos porque fueron sus propios padres quienes, según relata la exdeportista en su autobiografía —Verona Van de Leur, escrita en 2014—, se apropiaron del dinero que había amasado como gimnasta. Ella denunció a sus progenitores y ganó el juicio, pero tanto la exgimnasta como el que era entonces su novio dilapidaron todo el dinero que habían recuperado.
Fue así cómo Verona acabaría dando con sus huesos en la industria para adultos, no sin antes haber vivido varios episodios turbios: pasó 72 días en la cárcel por intento de chantaje, después de que la Policía encontrara pornografía infantil en su portátil y la detuvieran un arma de fuego. Además, tuvo que vivir en un coche durante dos años. Una vida sencillamente trágica.
Su vida había dado un giro radical, y fue entonces, en 2011, cuando le ofrecieron dedicarse al mundo del porno. Según informa El Periódico, Verona no dudó y aceptó la oferta debido a sus problemas acuciantes problemas económicos. Pero ahora, ocho años después, hay otra vuelta de tuerca más: la exgimnasta ha decidido retirarse de la industria para adultos y, a sus 33 años, planea volver al deporte.