Shane Lowry ha roto una racha negativa para los golfistas europeos reteniendo el título del Open Británico en el Viejo Continente. La euforia se desató en todo su entorno: él lo celebró entrando en un pub, trofeo en mano, y cantando una tradicional canción irlandesa. Sin embargo, quien más lo celebró fue su abuela, Emily Scanlon. No todos los días se gana el trofeo con más prestigio del mundo en cuanto a golf se refiere.
"¿El brandy? Ni me lo menciones. Me tomé dos. Hacía que no me tomaba uno desde 2009. Casi me muero. Estuve en un pub viendo los últimos hoyos de Shane con los nervios a flor de piel", confesó la abuela del flamante campeón del The Open a RTÉ News.
'I hadn't drank a brandy since 2009 - drank two yesterday, it's nearly killing me.' Shane Lowry’s grandmother speaks of a proud day pic.twitter.com/qqgCBRifNC
— RTÉ News (@rtenews) July 22, 2019
El orgullo de abuela es difícil de medir, por eso, en la misma entrevista repasó lo que sintió al ver a su nieto alzar el trofeo: "Estoy muy orgullosa de él. Muy orgullosa. Tuvimos una vida austera, pobre, pero siempre fuimos felices".
Como gran anécdota a destacar, Scanlon destacó el día que su abuelo le comparó con, nada más y nada menos, Tiger Woods. "Recuerdo cuando ganó la Mullingar Scratch Cup y llegó a casa, le grité que fuera inmediatamente a por un trozo de hierba. Su abuelo respondió: 'Tiger Woods no trae trozos de hierba'. ¡Le estaba comparando con Tiger Woods!", comentó.