El drama que vive el número 1 del ajedrez español, Francisco Vallejo, es difícil de contextualizar. Su historia, surrealista, parece una broma de muy mal gusto. Lleva dos años con una ansiedad y una presión tal que le afecta a su propia carrera como ajedrecista. Problemas físicos y emocionales le han hecho rendir por debajo de su capacidad llegando incluso a abandonar un torneos, el Campeonato de Europa individual absoluto que se celebra en Batumi (Georgia).
Todo comenzó con una partida de poker online. Una maldita partida, allá por 2011, que Vallejo no olvidará jamás. El mismo lo explica en su cuenta de Facebook: "Jugué por diversión, no soy ningún ludópata ni mucho menos. Lo perdí todo, unos pocos miles y dejé de jugar. Ahí se quedó".
Sin embargo, cinco años después de aquella partida, Hacienda llamó a su puerta: "Me reclama más de medio millón de euros, porque usted jugó al poker y perdió. Parece una broma macabra, pero no lo es. A partir de ese momento empieza una bola de nieve que te va aplastando".
Ahí comienza su vía crucis particular, una presión que llega al punto de generarle infecciones en su piel:
Empiezan los abogados, las reuniones con Hacienda. Empiezo a cancelar torneos, empiezan las infecciones en la piel por cuestión de nervios, tengo que cancelar mi participación con la Selección Nacional porque no aguanto la presión". Además, "coincide con mi madre enganchada en los Valores Santander y con una infección de salud gravísima en el extranjero que casi acaba con su vida, y a la que no pude hacer frente por culpa de que Hacienda ya ha cogido todo lo que tenía y aún reclama más...
Destrozado física y emocionalmente, Francisco considera un error haber acudido al Campeonato de Europa donde se ha retirado por primera vez en su carrera:
"Pensé que podía con todo, pensé que la mala suerte acabaría algún día, que seguiría luchando como si nada hubiese ocurrido, y lo he intentando cada día, durante casi dos años. No soy fácil de desequilibrar, creo que un Gran Maestro de ajedrez es por definición, una persona acostumbrada a lidiar con situaciones difíciles", pero "una vida idílica se puede convertir en un desastre a gran velocidad".
Los problemas del presente le impiden lucir en el tablero. Necesita justicia para ver algo de luz en el túnel en el que está metido.
"Ahora mismo mi mente es incapaz de aguantar un largo torneo de lucha de decepciones y de nervios. ¿Justicia? Si gano, habré perdido miles de euros y destrozado años de mi vida que nadie compensará. Si pierdo... no lo quiero ni pensar. ¿Futuro? Difícil plantear un largo plazo, y muy triste tener que representar al país que te ha tratado como a un criminal, que te ha ignorado, y que te ha destrozado".
¿Por qué le reclama Hacienda casi 600.00 euros?
Todo parte del sistema tributario que regía en España, hasta 2011, para cobrar los beneficios de las apuestas y juegos online . Con este sistema se tributa a los beneficios mayores de 2.500 euros, pero no se compensa con las pérdidas. Es como si se tributara por manga jugada. Si gana tributa, si pierde no. Si gana 100 mangas (cada una de ellas por más de 2.500 euros), y en la misma partida pierdes otras 100 (por la misma cantidad), debe pagar impuestos por las mangas ganadas, al margen de cuál haya sido el resultado final, y de si finalmente ha habido pérdidas o pocos beneficios.
"Tienes 200 euros. Apuestas 100 euros 1.000 veces, unas veces doblas y otras pierdes. 499 veces ganas y 501 veces pierdes. Para Hacienda, has ganado 49.900 euros, cuando en realidad has perdido tus 200 euros iniciales! Esto ocurre porque en 2011 no estaba adaptada la ley y no se tenía en cuenta la compensación con las pérdidas", explica en Facebook, Vallejo.
Recuerda que su caso "no es un caso único en España, hay cientos iguales", ya que "muchas personas que en su día jugaron a póker o apuestas deportivas por hobby, y perdieron pequeñas cifras, están hoy envueltos en procesos judiciales terribles, con sus cuentas embargadas y con sus vidas destrozadas". El propio Vallejo ha presentado un Contencioso contra Hacienda por la deuda.
El ajedrecista asegura que "esta injusticia flagrante fue corregida y mejorada" en 2012, donde se aclara la ley anterior , y a partir de esa fecha, ya se pueden compensar pérdidas y ganancias para tributar realmente por lo que uno ha ganado". Ahora bien lamenta que "si tuviste la mala suerte de jugar en 2011 (como fue su caso), tu vida puede estar destrozada", y no entiende que "no se pueda aplicar retroactividad a la nueva Ley".