La Vuelta a España de esta edición tiene algo de particular. Las siete primeras etapas se disputan en territorio gallego. El aficionado al ciclismo disfruta de lo lindo con un ciclismo de quilates -la vuelta tiene este año una participación estelar con los Froome, Nairo Quintana, Alejandro Valverde o Contador, entre otros- mezclado con etapas vibrantes que recorren una sinuosa Galicia, que con su imponente paisaje embruja a espectadores y a unos corredores que se quedaron atónitos estos días atrás cuando vieron las habitaciones de hotel que la organización les había reservado. Camas redondas, con espejos, sugerentes cuadros... habitaciones con un cierto componente sexual que no invitan, precisamente, al descanso.
Algunos ciclistas han compartido en las redes sociales las fotos de su estancia. Es el caso del ciclista estadounidense Joe Dombrowski, que en Twitter acompañaba la imagen de su cuarto junto con este mensaje: "Esperaba que fuera una cama de agua: Las camas de La Vuelta podrían convertirse en una serie. Fijaros en los espejos y en la radio incrustada en la pared."
I was hoping it was a water bed. Beds of the Vuelta could become a series. Note the mirrors and wall-mounted radio. pic.twitter.com/aawWSsHMyB
— Joe Dombrowski (@JoeDombro) 22 de agosto de 2016
Dombrowski inició una cascada de comentarios, y se animó a compartir otros objetos insinuantes que decoraban la 'inocente' habitación.
@KennyElissonde There is also this... 😂😂 pic.twitter.com/y8TNstvIpj
— Joe Dombrowski (@JoeDombro) 22 de agosto de 2016
Sin duda, habitaciones insólitas en una prueba ciclista. En Galicia, cada rincón es especial.