La gran sorpresa saltó esta noche en el mundo de las artes marciales después que la estadounidense Miesha Tate se convirtió en la nueva campeona del peso gallo al vencer arrebatarle el título a su compatriota Holly Holm.
La pelea femenina más larga de la historia de la UFC se definió en el quinto asalto a favor de Tate después que le colocó una llave de pie y por la espalda a Holm, y cuando su rival intentó zafarse apretó más en la garganta.
Holm se desvaneció y pareció quedar inconsciente por la llave de estrangulamiento que le aplicó Tate. Holm volvía a estar en pie poco después, y Tate elogió a su rival derrotada.
"No hay mucha gente que no se hubiera rendido", destacó Tate, de 29 años. "Cayó como una campeona y eso tiene tanto o más mérito como si me hubiese ganado".
Holm empezó bien su primer combate de defensa del título desde que derrocó a la gran estrella mediática, su compatriota Ronda Rousey, con un nocáut por una demoledora patada en la cabeza, el pasado noviembre, en Australia.
Durante los tres primeros asaltos, la campeona defensora del título gallo abrumó a Tate con puñetazos, que llegaron a su objetivo.
Pero todo cambió cuando Tate hizo un intento desesperado de imponerse y se colocó a la espalda de Holm, que peleó con fiereza para liberarse, pero terminó derrotada.
Tate sometió a Holm con una guillotina al cuello decisiva luego de ir virtualmente abajo en las tarjetas 49-48.
La nueva campeona ingresó al selecto grupo de campeones de Strikeforce y UFC en lo que fue la peles femenina estelar de la velada de UFC 196.
Tate mejoró su marca profesional a 18-5, mientras que Holm, de 34 años, perdió el invicto al quedarse con la primera derrota en las 11 peleas que ha disputado dentro de la UFC.
En la tercera pelea previa a la de Tate y Holm, en peso semipesado, el kosovo albanés Ilir Latifi superó por decisión unánime al estadounidense Gian Villante tras tres asaltos.
Latifi dominó el combate desde el principio y los jueces le otorgaron tarjetas favorables idénticas 30-27.
En pelea de peso semipesado, el estadounidense Corey Anderson se impuso por decisión unánime a su compatriota Tom Lawlor con tarjetas 30-27, 30-27 y 29-28.
Mientras que en el primer combate de la noche, la brasileña Amanda Nunes ganó también por decisión unánime a la peruana Valentina Shevchenko con tarjetas de 29-27.