Ryan Lochte ha conquistado en Kazán su cuarto oro mundial consecutivo en los 200 metros estilos, su prueba favorita donde ha sido capaz durante toda su carrera de expresar su tremendo talento natural. Lotche siempre ha tenido que luchar contra el mejor talento de la historia de las piscinas, el tiburón Michael Phelps. Con él ha protagonizado duelos épicos y entre los dos se han convertido en dos leyendas vivientes de la natación.
En la final de hoy, el estadounidense ha marcado diferencias desde el principio de la prueba y se ha hecho con la victoria con relativa facilidad (1’55"81) ante el brasileñoThiago Pereira (1’56"65) y el chino Wang Shun (1’56"81), que se han colgado la plata y el bronce, respectivamente. A pesar de su dominio en los Mundiales, a Lochte le falta el oro olímpico en los 200 estilos, donde Phelps siempre le ha privado de la gloria final.
Lochte se ha convertido en el primer nadador de la historia capaz de subir al podio en la misma prueba en seis mundiales consecutivos, buena muestra de tremenda regularidad que atesora este tremendo nadador. Bronce en Montreal’2005 y plata en Melbourne’2007, Ryan ha recogido después cuatro oros de carrerilla en los 200 estilos en Roma’2009,Shanghai’2011, Barcelona’2013 y Kazán’2015.
Lochte acumula ya 24 medallas mundiales, el segundo mayor botín de todos los tiempos por detrás de Phelps, con 16 oros, cuatro platas y cuatro bronces.