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Acusan a Chris Froome de haberse dopado o utilizar un motor en Mont Ventoux en 2013

En pleno ascenso, el británico movió 1.000 vatios de potencia con 160 pulsaciones por minuto. En el pelotón se preguntan si es dopaje o usó motor.

Chris Froome asestó este martes un golpe de autoridad al Tour de Francia con su victoria en La Pierre Saint-Martin, en la primera etapa de Los Pirineos, destrozando a casi todos sus rivales, entre ellos un Alberto Contador al que metió casi tres minutos.

Sin embargo, su alegría y la del equipo Sky se vio ensombrecida por los ataques de varios equipos y algunos exciclistas, entre ellos Lance Armstrong, que han acusado a la formación británica de dopaje.

Sin embargo, en el Sky entienden que estos ataques son un complot para tratar de desprestigiar a su jefe de filas, ganador de la Grande Boucle en 2013.

Según denuncia el Sky a través de su director, Dave Brailsford, el equipo fue objeto de un ataque cibernético que terminó con diferentes datos de entrenamiento de Froome, que el equipo guardaba bajo llave, circulando por las redes sociales y sirviendo de pretexto para acusar al británico de consumir sustancias prohibidas e incluso de haber utilizado un motor en aquella edición de 2013.

Según informaba la agencia APF, circuló un vídeo de la victoria de Froome en el
Mont Ventoux, en 2013, acompañado de numerosos datos de rendimiento como ritmo cardíaco, frecuencia de pedalada o velocidad. Esos parámetros ofrecían números cuando menos sospechosos, pues el corredor nacido en Kenia llegó a mover 1.000 vatios de potencia, con poco más de 160 pulsaciones por minuto, en pleno ascenso.

Froome llama "payasos" a los acusadores

Según Antoine Vayer, extécnico del equipo Festina, esos datos indicarían el consumo de sustancias dopantes o incluso la utilización un motor en la bicicleta. "Lo importante es que los datos del vídeo y el hecho de que las personas que saben de ciclismo, o los que no saben, lo vean y saquen conclusiones por sí mismos", dijo Vayer en declaraciones a CyclingNews.

"Nunca daría nombres, pero ética o moralmente si uno va a acuasar a alguien de dopaje, entonces que no haga trampa", indicó Brailsford, que aseguró que el equipo no hará públicos los datos sustraídos.

El ciclista, por su parte, se mostró mucho más molesto: "Veo cómo algunos payasos analizan los datos y dicen: 'Diste este rendimiento por encima de diez minutos. Debes estar dopándote'. Eso no nos ayuda y muestra una imagen falsa".

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