El Gobierno nipón estudia varias medidas para combatir el calor en la capital de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 como pavimentar con un material capaz de rebajar la temperatura y promocionar la creación de espacios verdes.
El Ejecutivo teme que las altas temperaturas del verano tokiota puedan afectar a los maratones y otros eventos, por lo que consideran necesario lograr un ambiente confortable para los atletas y los visitantes de todo el mundo.
Entre las medidas se estudia también la incorporación de equipos médicos de emergencia para tratar golpes de calor y otros síntomas relacionados, además de acondicionar más los estadios y sedes deportivas, según informaciones recogidas hoy la cadena pública NHK.
Funcionarios de los Ministerios nipones de Medio Ambiente y Transporte e Infraestructura, del gobierno metropolitano de Tokio y otras entidades comenzaron la semana pasada las reuniones para discutir las medidas a adoptar.
Los Juegos Olímpicos de Tokio tendrán lugar entre el 24 julio y el 9 agosto y los Paralímpicos entre finales de agosto y principios de septiembre, lo que implica que ambos se celebrarán en un clima muy caluroso y húmedo, con temperaturas máximas de 30 grados de media y una humedad relativa del 71 por ciento.
Las previsiones climatológicas de la Agencia nipona de Meteorología advierten además de la posibilidad de que se produzca un incremento anual medio de 1 grado en el periodo entre 2016 y 2035 debido al calentamiento global, lo que podría llevar los termómetros a dispararse durante la cita por encima de los 40 grados.