Por sólo dos segundos. Pero el primer asalto camino del Tour de Francia ha sido para el británico Chris Froome, que se llevó la general de la Vuelta a Andalucía por delante de Alberto Contador. No es un test importante, pero marca un poco el camino a seguir para ambos ciclistas. Ellos son los dos principales favoritos, y parece que se van a marcar cara a cara durante todos estos meses previos al Tour de Francia.
Fue la primera toma de contacto, con un recorrido que tenía una contrarreloj corta y dos duros finales en alto. Y fue en estos dos donde se vio el gran duelo bajo el -poco- calor andaluz. Ninguno de los dos ha elegido comenzar su temporada fuera de Europa, como sí han hecho otros grandes nombres como Vincenzo Nibali, vigente ganador del Tour y al que todos tienen en un segundo plano; o Nairo Quintana, el cuarto de la terna de ases.
Contador una etapa; Froome etapa y general
La general de la Ruta del Sol fue para el británico por sólo dos segundos. Una victoria que se cimentó en la penúltima etapa. Contador cogió el maillot rojo de líder tras los dos sectores del primer día que contenía una crono corta. Y remató ese liderato con la primera llegada en alto de la carrera, que fue en la tercera etapa, en Granada, en Hazallanas, sacándole 19 segundos en apenas 12 kilómetros, de los cuáles, el madrileño hizo más de siete en solitario.
Pero al día siguiente, Froome quería mostrarle a Contador que él tampoco había venido de paseo. Lejos quedan las épocas donde estas primeras carreras de principios de año las disputaban aquellos que luego serían gregarios de estos jefes de filas. Se agradece ver a dos de los grandes peleando de principio a fin, desde estas carreras, hasta el Tour, o incluso la Vuelta, como fue el año pasado. Allí ganó Contador; en Andalucía, con la subida a Allanadas en la que Froome vació a Contador, fue el del Sky el que subió a lo alto del podio. Y el resto a más de dos minutos en tan sólo cinco días y dos finales en alto. Un mundo.
Primer "amistoso"
Esto no significa que el británico esté en mejores condiciones para ganar el Tour. Al igual que en los equipos de fútbol, en donde una pretemporada sirve para conocer el estado de forma, estas carreras iniciales son para testarse, los entrenamientos en competición. Todavía tienen más "amistosos", en los que poco a poco van subiendo el nivel, tanto por ser carreras World Tour, como por los rivales, el perfil, y sobre todo, por la cercanía de la ronda gala.
De esta forma, por delante quedan carreras como la Tirreno – Adriático, la próxima cita del cara a cara, del 11 al 17 de marzo, y que rivaliza con la Paris – Niza. Además, no estarán ellos sólos. Será el momento de ver como llegan los demás, ya que allí coincidirán con Nibali, Quintana, así como con otros de los que tienen que pelear por el podio, como el francés Thiabut Pinot o el también español Purito Rodríguez.
Ésta será la próxima cita, ya dentro del World Tour. El año pasado se la adjudicó el de Pinto, con un tremenda exhibición atacando de lejos, y dejando a Quintana el segundo cajón del podio. Y este año busca repetir éxito. El año pasado, quitando la caída del Tour, Contador subió al podio en todas las carreras por etapas que disputó. Froome llevó una preparación algo más caótica, arrancando en Omán, donde lo ha hecho Nibali este año. Luego una gripe le dejó mermado y regresó en Romandía, ganando.
Ninguno se llevaría el Tour, ya que sendas caídas les mandaron a casa. El ganador final fue un Vincenzo Nibali que dominó el Tour desde la segunda etapa, ganando en Sheffield. Y tuvo un arranque más bien flojo, pues no ganó hasta junio, cuando se impuso en el campeonato de Italia. "Pretemporada" floja, pero campeón del Tour.
Así que tras un primer combate, el punto es para Chris Froome demostrando haber podido recuperar mejor de una a otroa etapa de montaña. En la crono le superó Contador, metiéndole ocho segundo en ocho kilómetros, y ganando la primera de montaña, como le gustaba a Armstrong. Así que las espadas están en alto, pero quizás, por un poco, la iniciativa la tiene Froome. El segundo capítulo llega en unas semanas, en Italia. Así arranca el camino a París.