L D (EFE) Entre las versiones que circulan por estas horas, una de la que se hacen eco todos los medios indica que los médicos mantienen desde el último lunes sujeto de pies y manos a la cama al astro del fútbol argentino para contener sus reacciones violentas, comunes en los pacientes que están en período de abstinencia a las drogas.
Según esas informaciones, los especialistas de la Clínica del Parque, un centro de rehabilitación para drogadictos en el que permanece desde el pasado domingo, mantendrán en estas condiciones a Maradona hasta el próximo viernes. También se dice que el ex futbolista tuvo el martes una crisis de nervios por la que debió ser sedado, que sufrió descompensaciones, que discutió con su médico personal, Alfredo Cahe, a quien le reiteró el pedido de abandonar cuanto antes la clínica, y que hasta se negó a comer y beber.
En una de sus descompensaciones sufrió un ataque de ira, que según los médicos se produce cuando un paciente se despierta y reacciona ante la medicación que se le suministra. Por su negativa a comer, el Pelusa es alimentado mediante una sonda, aunque está previsto que en breve comience con un plan de nutrición que consistirá en la ingesta de 1.300 calorías diarias divididas en cuatro comidas. Los médicos aseguran, según estas mismas versiones, que Maradona saldrá adelante con este tratamiento y que la próxima semana no podrá ser visitado por ningún familiar directo.
Su ex esposa, Claudia Villafañe, visitó el martes de forma sorpresiva la clínica e incluso un periódico de Buenos Aires comenta que brindó con agua con Maradona por haberse completado un día más de abstinencia. A través de los abogados del ex jugador, la familia de Maradona pidió el retiro de los periodistas que hacen guardia en las inmediaciones de la clínica, por "razones humanitarias" y porque "impiden el normal desenvolvimiento" del centro de recuperación.
Desde que Maradona fue ingresado en grave estado en una clínica de la capital el pasado 18 de abril, afectado por una severa crisis cardiorrespiratoria, medios de prensa locales y extranjeros han montado guardia permanente en los lugares donde el ex capitán de la selección argentina ha estado. Primero fue en la clínica Suizo Argentina, luego en una finca de las inmediaciones de Buenos Aires, donde el ex futbolista pasó seis días recluido, después en el mismo sanatorio y ahora en el centro de rehabilitación.
En su último parte médico difundido el pasado lunes, la Clínica del Parque señalaba que los médicos trabajan en la "estabilización psicofísica" de Maradona, que se encuentra "estable y compensado". Alfredo Cahe ha dicho que ésta es la "la última oportunidad" que tiene Maradona, de 43 años, para superar su adicción a las drogas. La prensa también afirma que está casi definido un próximo traslado de Maradona a Cuba, a un centro de recuperación en la provincia de Holguín y no a la clínica La Pradera, en la que el ex futbolista se sometió a un tratamiento desde el año 2000.
Según esas informaciones, los especialistas de la Clínica del Parque, un centro de rehabilitación para drogadictos en el que permanece desde el pasado domingo, mantendrán en estas condiciones a Maradona hasta el próximo viernes. También se dice que el ex futbolista tuvo el martes una crisis de nervios por la que debió ser sedado, que sufrió descompensaciones, que discutió con su médico personal, Alfredo Cahe, a quien le reiteró el pedido de abandonar cuanto antes la clínica, y que hasta se negó a comer y beber.
En una de sus descompensaciones sufrió un ataque de ira, que según los médicos se produce cuando un paciente se despierta y reacciona ante la medicación que se le suministra. Por su negativa a comer, el Pelusa es alimentado mediante una sonda, aunque está previsto que en breve comience con un plan de nutrición que consistirá en la ingesta de 1.300 calorías diarias divididas en cuatro comidas. Los médicos aseguran, según estas mismas versiones, que Maradona saldrá adelante con este tratamiento y que la próxima semana no podrá ser visitado por ningún familiar directo.
Su ex esposa, Claudia Villafañe, visitó el martes de forma sorpresiva la clínica e incluso un periódico de Buenos Aires comenta que brindó con agua con Maradona por haberse completado un día más de abstinencia. A través de los abogados del ex jugador, la familia de Maradona pidió el retiro de los periodistas que hacen guardia en las inmediaciones de la clínica, por "razones humanitarias" y porque "impiden el normal desenvolvimiento" del centro de recuperación.
Desde que Maradona fue ingresado en grave estado en una clínica de la capital el pasado 18 de abril, afectado por una severa crisis cardiorrespiratoria, medios de prensa locales y extranjeros han montado guardia permanente en los lugares donde el ex capitán de la selección argentina ha estado. Primero fue en la clínica Suizo Argentina, luego en una finca de las inmediaciones de Buenos Aires, donde el ex futbolista pasó seis días recluido, después en el mismo sanatorio y ahora en el centro de rehabilitación.
En su último parte médico difundido el pasado lunes, la Clínica del Parque señalaba que los médicos trabajan en la "estabilización psicofísica" de Maradona, que se encuentra "estable y compensado". Alfredo Cahe ha dicho que ésta es la "la última oportunidad" que tiene Maradona, de 43 años, para superar su adicción a las drogas. La prensa también afirma que está casi definido un próximo traslado de Maradona a Cuba, a un centro de recuperación en la provincia de Holguín y no a la clínica La Pradera, en la que el ex futbolista se sometió a un tratamiento desde el año 2000.