L D (EFE) La primera parte dejó en evidencia a los dos conjuntos. Muy mal el Mallorca, trabado en el centro del campo, sin hallar resquicios arriba y sin un sólo futbolista capaz de romper el ritmo cansino de las acciones, pese al empeño del argentino Jonás Gutiérrez en la banda derecha y de Sergio Ballesteros, muy sólido en la defensa. Pésimo, también, el Deportivo que ofreció una primera parte indigna del aquel estupendo equipo que fue no hace muchas temporadas atrás.
Es cierto que su técnico Joaquín Caparrós le ha cambiado la cara -ahora es el "Baby Dépor"-, sí, pero rebajando su perfil hasta reducirlo a uno de esos conjuntos mediocres, que se agazapan atrás, no dudan en apelar a las faltas para romper el ritmo del rival y confían su suerte en ataque a errores del contrario. ¿Dónde se perdió aquel Dépor que maravillaba con su juego, que intentaba imponer sus argumentos futbolísticos, sin recurrir a la falta y al patadón? Desde luego, está en las antípodas del equipo que se presentó en Palma, para desgracia de los aficionados que aprecian el buen fútbol y que hoy padecieron un tostón de partido en los primeros 45 minutos, periodo en que sólo se registraron dos llegadas con cierto peligro, una en cada área, a cargo de Arango (min. 15) y Juan Rodríguez (min. 41).
En la segunda parte, la entrada al terreno de juego del "Caño" Ibagaza fue providencial para el Mallorca. El centrocampista argentino cogió la riendas del equipo y con su gran clase y visión de juego creó la mejores ocasiones, como la desperdiciada por su compatriota Maxi López -muy desafortunado- en el minuto 70. El "Caño" fue amo y señor de la zona ancha y una pesadilla para los blanquiazules, que ya habían realizado su primer cambio con la entrada de Rodolfo Bodipo por Ricky.
El Mallorca, lanzado al ataque, dejó espacios para un Dépor que también intentó sorprender a Toni Prats -un disparo de Sergio (min. 66) fue detenido con mucha dificultad por el meta mallorquín- pero sin éxito. Los minutos se fueron consumiendo sin que ninguno de los dos equipos encontrara espacios para sorprender a la portería rival, es decir, la tónica de lo que fue el partido a lo largo de los noventa minutos de juego.
Es cierto que su técnico Joaquín Caparrós le ha cambiado la cara -ahora es el "Baby Dépor"-, sí, pero rebajando su perfil hasta reducirlo a uno de esos conjuntos mediocres, que se agazapan atrás, no dudan en apelar a las faltas para romper el ritmo del rival y confían su suerte en ataque a errores del contrario. ¿Dónde se perdió aquel Dépor que maravillaba con su juego, que intentaba imponer sus argumentos futbolísticos, sin recurrir a la falta y al patadón? Desde luego, está en las antípodas del equipo que se presentó en Palma, para desgracia de los aficionados que aprecian el buen fútbol y que hoy padecieron un tostón de partido en los primeros 45 minutos, periodo en que sólo se registraron dos llegadas con cierto peligro, una en cada área, a cargo de Arango (min. 15) y Juan Rodríguez (min. 41).
En la segunda parte, la entrada al terreno de juego del "Caño" Ibagaza fue providencial para el Mallorca. El centrocampista argentino cogió la riendas del equipo y con su gran clase y visión de juego creó la mejores ocasiones, como la desperdiciada por su compatriota Maxi López -muy desafortunado- en el minuto 70. El "Caño" fue amo y señor de la zona ancha y una pesadilla para los blanquiazules, que ya habían realizado su primer cambio con la entrada de Rodolfo Bodipo por Ricky.
El Mallorca, lanzado al ataque, dejó espacios para un Dépor que también intentó sorprender a Toni Prats -un disparo de Sergio (min. 66) fue detenido con mucha dificultad por el meta mallorquín- pero sin éxito. Los minutos se fueron consumiendo sin que ninguno de los dos equipos encontrara espacios para sorprender a la portería rival, es decir, la tónica de lo que fue el partido a lo largo de los noventa minutos de juego.
Real Mallorca, 0: Toni Prats; Varela, Nunes, Ballesteros, Fernando Navarro, Jonás Gutiérrez, Pereyra (Jordi López, min. 64)), Basinas, Tuni ("Caño" Ibagaza, min. 64); Arango y Maxi López (Víctor Casadesús, min. 71)
Deportivo, 0: Aouate; Barragán, Lopo, Arbeloa, Capdevila; Duscher, Coloccini; Arizmendi (Cristián, min. 90), Sergio (Filipe, min. 82), Riki (Bodipo, min. 67); y Juan Rodríguez
Árbitro: Megía Dávila (madrileño). Amonestó a Capdevila, Lopo y Bodipo del Deportivo
Incidencias: partido correspondiente a la segunda jornada de Liga disputado en el Ono Estadi de Palma ante unos 16.000 espectadores. Antes del partido sonó el himno de La Balanguera con motivo de la celebración de la Diada de Mallorca el próximo día 12. Se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento del ex jugador del Mallorca Josep Crespí Pizá. En el descanso, el baloncestista mallorquín Rudy Fernández, integrante de la selección española que se proclamó campeona del mundo en Japón y que obtuvo el Premio Príncipes de Asturias de los Deportes, fue homenajeado y recibió una réplica a escala del Ono Estadi de manos del presidente del Mallorca, Vicente Grande. También fue obsequiado con una camiseta del equipo con su nombre en la espalda que le entregó su primer entrenador en la isla, Pedro Terrasa.