L D (EFE) El base francés Tony Parker, el escolta argentino Manu Ginóbili y el alero Tim Ducan volvieron a ser la clave de la victoria al combinarse con una aportación de 78 puntos, mientras que la estrella de los Cavaliers, el alero LeBron James fue el máximo encestador de su equipo con 25 puntos, pero totalmente irrelevantes y sin ningún tipo de validez de cara a evitar la derrota.
Parker lideró, como hizo en el primer partido el ataque de los Spurs al conseguir 30 puntos (13 de 20 tiros de campo), mientras que Ginóbili lo apoyó con 25 (estuvo perfecto desde la línea de personal 11-11 y 4 de 6 triples) y Duncan dominó bajo los aros con 23 tantos, nueve rebotes y ocho asistencias. "Hemos jugado confiamos en nuestras posibilidades y sólo en los últimos siete minutos del cuarto, que fue cuando apretaron los Cavaliers sentimos algo de presión", comentó Parker.
Ginóbili, que jugó 28 minutos, anotó 5 de 11 tiros de campo, capturó seis rebotes y recuperó tres balones, pero una vez más también fue el jugador que protagonizó la canasta decisiva del partido en el cuarto periodo. Con 2:24 minutos por jugarse del partido, y los Cavaliers reduciendo a ocho la desventaja en el marcador parcial (89-97), Ginóbili anotó un triple y el novato Daniel Gibson le cometió falta personal para transformar la jugada en cuatro puntos que iban a ser los decisivos. Los Spurs se ponían de nuevo con doble dígitos y el parcial de 101-89 que acabó con la ligeras esperanzas que aun tenían Cavaliers de forzar la prórroga.
Junto a Parker, Ginóbili y Duncan, el pívot argentino Fabricio Oberto jugó 20 minutos y aportó cuatro puntos con cuatro rebotes, mientras que el veterano Robert Horry volvió a ser el factor sorpresa con una gran aportación en el apartado defensivo. Horry consiguió cinco puntos (1-3 tiros de campo, fue un triple en dos intentos, y 2 de 2 desde la línea de personal), capturó nueve rebotes, puso cinco tapones y repartió cuatro asistencias. "No tengo ningún problema en defender y siempre se me ha dado bien", declaró Horry. "Sabíamos que si manteníamos la presión en el juego defensivo no íbamos a tener problemas con el resultado final".
Todos los jugadores de los Spurs reconocieron que el partido no tuvo mayor interés y sólo en los últimos cinco minutos cuando los Cavaliers consiguieron rebajar la desventaja a menos de 10 tantos se dieron cuenta que debían asegurar la victoria. El convencimiento de superioridad de los Spurs fue tal que desde las pancartas de los aficionados tejanos hasta el anunciador del partido quisieron completar la jornada dominical con referencias a James y la poca calidad que tienen los Cavaliers como equipo.
James no despejó ningún tipo de interrogante sobre su liderazgo y aunque anotó 25 puntos, 11 más que el primer partido cuando estuvo mediocre y sin ningún tipo de acierto, los 12 tiros de campo que falló de 21 intentos, incluidos dos tipos no era motivo de alegría para nadie. Tampoco estuvo consistente en la línea de personal y anotó 7 de 11 tiros, mientras que se quedó con siete rebotes, seis asistencias y perdió seis veces el balón. "Ellos han sido superiores en los dos partidos de su campo y ahora nos tocará a nosotros hacer lo propio cuando lleguemos a Cleveland", comentó James. "Me he sentido mucho más cómodo en el segundo partido, pero no he podido cambiar la inercia de derrota del equipo".
Además, James también tuvo problemas de personales y los Cavaliers se quedaron con un 40,7 por ciento de acierto en los tiros de campo por el 48,1 de los Spurs, que dominaron los rebotes con 46 y 42 del equipo de Cleveland. Gibson volvió a hacer su trabajo y mantenerse en la línea de revelación con 15 puntos, incluidos dos triples de cinco intentos, pero la producción llegó el los últimos minutos del partido cuando los Spurs ya estaban pensando en irse a las duchas y prepararse para viajar a Cleveland, donde quieren proclamarse campeones. El alero Drew Gooden aportó 13 puntos con seis rebotes y el serbio Sasha Pavlovic firmó 10 tantos para ser el cuarto jugador de los Cavaliers que anotaron en doble dígitos. El alero brasileño Anderson Varejao jugó 28 minutos y fue el líder de la defensa de los Cavaliers al capturar 10 rebotes, con ocho puntos (2 de 2 tiros de campo y 4 de 7 desde la línea de personal).