Loeb logra en el Rally de Portugal su tercera victoria de la temporada y Dani Sordo sufre para acabar quinto

L D (EFE) La victoria finalmente ha sido para Loeb, que en lugar de administrar tranquilamente la ventaja que tenía sobre Gronholm, también ha atacado este domingo y ha marcado el mejor tiempo en dos de los tramos disputados. Gronholm ha sido quien ha ocupado la segunda plaza. Finalmente ha quedado como anécdota la posible expulsión del piloto escandinavo del rally, puesto que el sábado, tras finalizar la segunda etapa, el Ford Focus WRC pesaba menos de lo permitido. Pero todo el incidente se ha podido subsanar recolocando al coche algunos de los elementos que había perdido a lo largo del recorrido de la etapa.

La tercera plaza, la que estaba aún por decidir, finalmente se la ha adjudicado Mikko Hirvonen, que ha marcado el mejor tiempo en el primer tramo de este domingo y después de que su perseguidor, Petter Solberg, se conformara con la cuarta plaza y decidiera no arriesgar más de lo necesario para poder llegar a meta.

Con estos resultados, Gronholm sigue líder en el Mundial de pilotos y Ford en el de constructores, pero Loeb se acerca y está ahora a sólo dos puntos del finlandés. Con esta victoria, el Loeb suma 31 victorias en el Mundial y sigue batiendo marcas. Este año ha conseguido tres victorias (Montecarlo, México y ahora en Portugal), y de no haber quedado fuera de los puntos en Noruega tras dos accidentes en la segunda etapa, sería líder del Mundial con cierta ventaja sobre sus perseguidores.

Sordo, que en esta ocasión no ha tenido las complicaciones del sábado, cuando en la segunda pasada de los tramos las puertas de su C4 WRC no se cerraban y tuvo que improvisar unos cierres con cintas adhesivas, ha podido mantener su quinta plaza, sin arriesgar más de lo necesario para hacer llegar el coche a la meta. El joven piloto cántabro de Citroen nunca se encontró cómodo en la carrera y fue ampliamente superado por los cuatro de cabeza y por momentos por Jari-Matti Latvala, que ha estado cerca de arrebatarle la quinta plaza.