El Consejo Superior de Deportes ha dado la razón a la Liga en su petición de aplazar los partidos Sevilla-Barcelona y Villarreal-Deportivo Alavés. Ambos partidos tenían previsto jugarse este sábado 11, pero la convocatoria extraordinaria de CONMEBOL afectaba directamente a los internacionales de este encuentro y se entendía desde la patronal que era inviable que llegarán a tiempo para disputarlo.
La Real Federación Española de Fútbol, en constante lucha con La Liga, argumentó que este motivo no era causa de fuerza mayor para suspender ambos partidos, lo que obligó a LaLiga a recurrir al CSD para que atendiera su petición. Villarreal, Barcelona y Sevilla tienen partidos de Champions el martes y debían disputar el sábado su encuentro de Liga, por lo que era inviable pasar al domingo sus partidos como si ha ocurrido con el Atlético de Madrid —frente al Espanyol que se juega a las 14:00—y el Real Madrid —jugará ante el Celta en el Santiago Bernabéu el domingo a las 21h—.
Medidas cautelares
El Gobierno, mediante el CSD, ha concedido medidas cautelares a la petición que solicitó Javier Tebas el pasado viernes después de que la RFEF no quisiera aplazar los partidos. Sin embargo, dejan tiempo a la RFEF para que haga las alegaciones que considere y dan tiempo a los clubes para que hagan sus planes deportivos.