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El Real Zaragoza hunde al Lugo con un gol de su portero con el hombro en el 97'

Cristian Álvarez se convirtió en el gran héroe del Zaragoza en la final del Anxo Carro tras marcar el tanto del empate en el 97.

Agencias

El Real Zaragoza respira. Los maños viajaban a Lugo para medirse a un conjunto lucense que desde la incomprensible destitución de Nafti cayó en picado. Primero Luis César y ahora Rubén Albés. Tres meses sin ganar en una nefasta racha que les ha hundido en posiciones de descenso. El Zaragoza, seis puntos por encima de los lucenses, no querían dar vida a un equipo que está casi muerto. El partido era una auténtica final por la permanencia.

El Lugo se puso por delante con un tanto del tanque Manu Barreiro. Empató el Zaragoza en la segunda mitad tras un penalti del portero del Lugo, Varo, sobre Azón. Adrián puso las tablas. En la recta final llegó la locura. Primero marcó Venancio para poner el 2-1. El árbitro añadió seis minutos.

En el último minuto del descuento, una falta lateral la cuelga Bermejo y en el segundo palo ocurre el milagro. Cristian Álvarez, el portero del Real Zaragoza, había subido a rematar a la desesperada. Sin saber ni cómo lo hace, remata a gol. Se desata la locura en toda Zaragoza. Los de Juan Ignacio Martínez -espectacular trabajo del ex escolta de Isabel Pantoja reactivando a un equipo que estaba hundido- tienen la salvación a mano.

El Lugo, por su parte, no se lo cree. La victoria le reenganchaba a la pelea por la salvación y este mazazo cambia el sueño por pesadilla.

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