El meta del Cádiz Alberto Cifuentes, que este domingo, con 41 años y 114 días, se convirtió en el jugador de más edad en debutar en la Primera División española, en el partido que su equipo ganó en Huesca, dijo tras el encuentro que tenía "la piel de gallina" y que estaba "muy feliz".
"Estoy muy contento, muy feliz, con la piel de gallina ahora mismo. Vaya manera de entrar en la historia, eh, podría haberlo hecho antes", señaló Cifuentes a Movistar LaLiga.
Cifuentes, nacido el 29 de mayo de 1979 y con un pasado, entre otros clubes, en el Albacete, Real Mallorca, Rayo Vallecano y Murcia, y que llegó al Cádiz en 2015, no había tenido la oportunidad de jugar en Primera hasta este domingo.
Fue suplente en la primera jornada, cuando su equipo, ascendido este verano, perdió en casa ante Osasuna (0-2).
Este domingo, en El Alcoraz de Huesca, fue titular en el triunfo del Cádiz (0-2) con 41 años y 114 días. "Por supuesto me he acordado de mi actual pareja, de Marta, de mis hijos, que son los más importantes en mi vida, de mis padres, que me llevan siguiendo toda mi carrera, mi hermana. Es un poco dedicado a ellos", manifestó.
"Ellos me han seguido, me han apoyado mucho, saben lo que me ha costado, saben lo que me he equivocado, porque si no seguramente hubiera debutado antes. Entonces, en algún momento, me he equivocado para no hacerlo, pero están contentos de que esté aquí y de que pueda disfrutarlo", añadió Cifuentes.
Los 41 años y 114 días con los que se estrenó en Primera superan por mucho los 34 años con los que lo hicieron Armando Ribeiro y Vicente Moreno, el primero de ellos curiosamente también portero del Cádiz, el 28 de agosto de 2005, ante el Real Madrid (1-2).
Cifuentes, además, se convierte en el tercer jugador con más edad que ha jugado en Primera. Le preceden Harry Lowe, que lo hizo con 48 años y 226 días, en 1935, con una Real Sociedad de la que también era entrenador; y el también guardameta Ricardo, con 41 años y 153 días.