El futuro de Leo Messi en el Barcelona, más en entredicho que nunca. El astro argentino ha interrumpido este jueves sus vacaciones para verse las caras con el nuevo entrenador del equipo azulgrana, Ronald Koeman, apenas 24 horas después de la presentación del técnico holandés en el Auditorio 1899 del Camp Nou junto al presidente de la entidad, Josep María Bartomeu.
Según la emisora catalana RAC1, Messi le ha comunicado a Koeman, que ha firmado un contrato por dos temporadas, que no ve nada claro su futuro en el Barça y que, de hecho, ahora mismo se ve más fuera que dentro del club, aunque también es consciente de las dificultades que tiene para salir por su altísima ficha (49,5 millones netos al año) y porque todavía le queda un año más de contrato. Mientras, el club se remite a la astronómica claúsula de rescisión del jugador: 700 millones de euros.
Messi se ha reunido con Koeman en La Cerdaña (Gerona), en los Pirineos, según adelantó TyC Sports.
Este miércoles, en su presentación, Koeman dijo que su prioridad era saber los deseos de Messi, tras haber asegurado previamente que el rosarino era el "pilar fundamental" de su proyecto, como apuntó Josep María Bartomeu.
"No sé si tengo que convencer a Messi. Si quiere quedarse, yo estaré contentísimo, pero aún le queda un año de contrato. Así que es jugador del Barça", apuntó Koeman. "Hablaré con él para saber qué piensa del club y cómo quiere seguir", dijo el holandés para hacer toda una declaración de intenciones a continuación: "Sólo quiero trabajar con gente que quiere estar aquí y dar el máximo para el Barcelona".