El jugador nipón del Real Madrid, Takefusa Kubo tiene pocas opciones para jugar de comunitario en el equipo del Santiago Bernabéu. Así lo refleja la Ley de Nacionalidad Japonesa.
Una de las posibilidades sería por la obtención de residencia. Pero esto obligaría, según dicta la ley japonesa a elegir la nacionalidad nipona o la segunda que haya obtenido. De hecho, según esta normativa tiene dos años, desde la obtención de la nueva nacionalidad para elegir una de las dos ciudadanías.
Otra de las otras variantes que encontrar tener el futbolista, cedido esta campaña en el Mallorca, según la propia ley sería al contraer matrimonio con una ciudadana española o de los países de la UE. Solo de esa manera, Japón no anularía su pasaporte como nipón.
Diferentes opciones que reflejan la complejidad para no ocupar plaza de extracomunitario por parte del jugador madridista. Si lo consiguiera, el equipo blanco no debería hacer encaje de bolillos para poder tenerlo en su plantilla.