Aplazado el Deportivo-Fuenlabrada por varios positivos por coronavirus en el equipo madrileño

El partido entre el Deportivo de La Coruña y el CF Fuenlabrada, correspondiente a la última jornada de LaLiga SmartBank (Segunda División), ha sido suspendido debido a 12 casos de coronavirus en la plantilla del equipo madrileño —entre ellos siete futbolistas del conjunto entrenado por José Ramón Sandoval—, si bien el resto de la jornada se ha disputado con normalidad.

En una decisión de LaLiga y de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), con mediación del Consejo Superior de Deportes (CSD), se optó por suspender finalmente el duelo entre Deportivo y Fuenlabrada, clave tanto para el playoff de ascenso a Primera División como para el descenso.

Tras una reunión clave en la que se barajaron varias opciones, inicialmente se optó por no aplazar la jornada ni por hacer jugar al Fuenlabrada sin los jugadores que dieron positivo —en el test obligado al que son sometidos los equipos antes de un partido— y que están aislados del resto de la expedición.

LaLiga aseguró en un comunicado que fue de "mutuo acuerdo" entre las partes implicadas —LaLiga, RFEF, CSD en el marco de la Comisión de Seguimiento— que se optó por el aplazamiento del partido, por "causas de fuerza mayor".

Además, se optó por seguir adelante con el resto de la jornada. "La Comisión ha acordado también de mutuo acuerdo la disputa del resto de partidos de la Jornada 42 al entender que esta es la solución que mejor protege la salud de los futbolistas y la integridad global de la competición", explicó LaLiga.

El Fuenlabrada, confinado en La Coruña

Mientras, el Fuenlabrada se ha quedado confinado en el hotel Finisterre de la capital coruñesa donde se encontraba, por lo que algunos huéspedes han decidido cancelar sus habitaciones al conocer este hecho.

El Deportivo, por su parte, emitía un comunicado —antes de conocer su descenso matemático a Segunda B— en el que se oponen "de forma frontal" a la decisión optada por LaLiga, RFEF y CSD de suspender el partido al entender que se "adultera la competición y el espíritu de las dos últimas jornadas con partidos cuyos resultados influyen en los demás".