El Valencia ha acelerado la operación salida antes incluso de que finalice la presente campaña, todavía quedan dos jornadas por celebrarse, y de conocer si el equipo jugará competiciones europeas. Una revolución que podíamos intuir desde hacía ya meses pero a la que sólo faltaba ponerle fecha de inicio y Peter Lim no quiere dejar que pase más tiempo.
El propietario del Valencia quiere cambiar de forma radical la plantilla y favorecer la salida de pesos pesados dentro del vestuario. Y, según informó el portal Goal este martes, los primeros damnificados de la operación salida para este verano eran Dani Parejo, capitán del equipo ché, y un símbolo para el valencianismo, Francis Coquelin, uno de los mejores fichajes de los últimos años, y Geoffrey Kondogbia.
Del mismo modo, según Goal, la lista de Peter Lim es más extensa e incorpora otros pesos pesados como Rodrigo Moreno. Y tras varias temporadas en el mercado de verano, ahora es el propio Valencia quien busca dar salida al delantero.
Una lista que responde no sólo a criterios deportivos y económicos sino que desde el entorno de Anil Murthy se ha señalado a jugadores como Parejo, a quien le une una buena amistad con el extécnico Marcelino García Toral, manifestada públicamente por el jugador. Pero más allá de que sea una decisión empresarial, las formas de Lim chirrían.
Así, Lim debe vender jugadores por un valor neto de unos 40 millones de euros si quiere cuadrar su presupuesto pero esa cantidad, hasta el momento, es una incógnita pues el Valencia recuperó 24 millones de euros que había consignado para pagar una multa de la UE pero tampoco contaba con no tener ingresos por jugar competición europea.
Y es que el Valencia tiene pocas esperanzas de entrar en Europa, por lo que está en un proceso de cambio profundo incrementado por la crisis económica que supone la escasez de ingresos. Además, no jugar Champions implicaría pérdidas de más de 50 millones de euros, y no jugar la Europa League al menos unos 20. Pero a día de hoy estar o no en Europa Legue no cambia el plan de Peter Lim que se ha visto obligado a rebajar coste salarial sin pensar el nombre que fuera para su venta.