Como el Doctor Jekyll y Mister Hyde. Por otra parte, como viene siendo habitual esta temporada. Aunque llevaba más de tres meses sin jugar y el escenario ha sido distinto —por primera vez ha jugado en LaLiga en el estadio Alfredo Di Stéfano—, el Real Madrid ha ofrecido dos caras muy distintas pero ha acabado sumando los tres puntos para seguir la estela de un FC Barcelona que el sábado goleó al Mallorca en otro recital de Leo Messi.
Su víctima, el Eibar de José Luis Mendilibar. Un equipo amenazado por el descenso —los armeros están sólo dos puntos por encima del descenso que marcan precisamente los bermellones— que, después de verse sometido en una primera parte de clara superioridad local, aprovechó la siesta de los blancos tras el paso por vestuarios para llegar con mucho peligro al área de Courtois y acabar acortando distancias después de haber gozado de dos claras ocasiones en apenas dos minutos.
Rodrygo, la gran sorpresa en el once
En definitiva, victoria a medio gas de un Madrid que, después de haber perdido contra el Betis justo ante del parón por el coronavirus, vuelve a sonreír en el campeonato liguero. Zidane presentó un once muy ofensivo en el Di Stéfano con el regreso de Hazard tras su lesión, acompañando arriba a Karim Benzema. El protagonista inesperado, Rodrygo. Se había especulado con que el técnico galo pusiera a Isco o Marco Asensio —que finalmente se quedó sin jugar un solo minuto tras su larga lesión—, pero al final apostó por el brasileño. Y por detrás de ellos, un centro del campo clásico hasta antes del inicio de la temporada con Casemiro, Kroos y Modric, con lo que Fede Valverde se quedó en el banquillo. Zizou pensó en las rotaciones teniendo en cuenta que el jueves llega el Valencia a este mismo estadio.
Lo cierto es que la puesta en escena de los blancos fue inmejorable con el magnífico gol de Toni Kroos a los tres minutos, colocando la pelota con mucha calidad en la escuadra y haciendo inútil la estirada de Dmitrovic. Se barruntaba goleada fácil de los madridistas, pero el Eibar de Mendilibar no se arredró y poco a poco empezó a buscar la portería de Thibaut Courtois. De hecho, Kike García tuvo una buena ocasión para los visitantes, pidiendo penalti de un Dani Carvajal que acabaría siendo sustituido al descanso.
La pausa de hidratación le vino de cine al Madrid: Benzema y Hazard hicieron de las suyas por la derecha y así llegó la acción del 2-0. El belga habilitó a Sergio Ramos, que se pegó un tremendo carrerón desde atrás para culminar con acierto la jugada de contraataque, y, seis minutos después, un remate de Eden lo desvió Dmitrovic. La pelota le cayó a Marcelo y el brasileño conectó un formidable zurdazo para batir al cancerbero serbio y hacer subir el tercero al marcador. Lo celebró Marcelo hincando la rodilla en el suelo, en un claro homenaje a George Floyd. Le faltó contundencia a la defensa armera y le sobró hambre a un Madrid que parecía dejar los deberes hechos al descanso.
Siesta blanca tras el descanso
El partido parecía resuelto pero el Eibar se propuso dar guerra a la vuelta de vestuarios. Siempre empeñado en competir, y más con el descenso soplando en su nuca, el cuadro de Mendilibar reaccionó en el segundo tiempo y Edu Expósito tuvo dos veces el gol ante Courtois, una por un regalo del cancebero belga que el propio Thibaut resolvió a las mil maravillas con un paradón. Sólo dos minutos después, Sergi Enrich mandó un cabezazo al larguero en el preludio del 3-1, a la hora de partido. La insistencia armera tuvo su premio en un gol con fortuna y de rebote en Pedro Bigas.
El Madrid no estaba nada cómodo ante un Eibar peleón que parecía dispuesto a dar más guerra de la esperada. Pero lo cierto es que el paso de los minutos acabaría pasando factura a los vascos, que terminaron quedándose sin gasolina. Vinicius, Bale y Militao apenas pudieron aportar nada en el campo. Por contra, Fede Valverde, ya en la recta final, sí acabó por dar seguridad a un Real Madrid que, después de su gran primera mitad, se dedicó a sestear tras el intermedio. En definitiva, victoria a medio gas, pero merecida, para un equipo que ya espera su duelo del jueves contra el Valencia en este mismo escenario del Alfredo di Stéfano. Sin su público es otra cosa, pero el campo tiene las mismas medidas que el Santiago Bernabéu.
Aún faltan muchos detalles que pulir, pero al menos el Madrid ya ha podido sumar sus tres primeros puntos en la reanudación liguera tras el parón por la covid-19.
Ficha técnica
Real Madrid, 3: Courtois; Carvajal (Mendy, m.46), Sergio Ramos (Militao, m.61), Varane, Marcelo; Casemiro, Kroos, Modric (Valverde, m.84); Rodrygo (Bale, m.61), Hazard (Vinicius, m.61) y Benzema
Eibar, 1: Dmitrovic; Correa, Oliveira, Arbilla (Burgos, m.84), Soares (Bigas, m.58); Cristóforo, Sergio, Edu Expósito, Orellana (Pedro León, m.57), Kike (Enrich, m.57), De Blasis (Inui, m.78)
Goles: 1-0, m.3: Kroos; 2-0, m.30: Sergio Ramos; 3-0, m.37: Marcelo; 3-1, m.60: Pedro Bigas
Árbitro: Cuadra Fernández (C. Baleares). Amonestó a Marcelo (min.47) por parte del Real Madrid. Y a Cristóforo (min.90+) en el Eibar
Incidencias: Partido de la vigésimo octava jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio Alfredo Di Stéfano, a puerta cerrada por el coronavirus