El entrenador del FC Barcelona, Ernesto Valverde, ha asegurado que al equipo le "urge" lograr la victoria este sábado contra el Celta de Vigo por llevar dos partidos sin ganar y por la "sensación" que hay en el entorno blaugrana, si bien cree que pueden hacerlo bien de nuevo y ha negado estar preocupado por su futuro en el equipo. "Tenemos necesidad de una victoria porque venimos de perder contra el Levante en seis minutos. Necesitamos una victoria, es verdad, y encontrar la senda del triunfo porque sabemos lo que significa perder. Estamos motivados para ello, nos urge más por la sensación que hay y para mantener el liderato", explicó en rueda de prensa.
En cuanto a esa sensación, se refiere a las críticas que ha recibido el equipo por perder contra el Levante y empatar contra el Slavia Praga. "Lo entienda o no, esto es lo que hay. No tengo demasiado que decir salvo que si el partido lo hubiéramos llevado mejor y hubiéramos ganado o marcado un gol en el primer tiempo, todo el mundo estaría más tranquilo", apuntó.
No fue así, y ahora ganar al Celta es "importante por todo". "Llevamos dos partidos en los que no hemos ganado y eso siempre genera inestabilidad. Nos hacemos mucho eco de los que quieren que nos desequilibremos. Tenemos que mantener el pulso y estar firmes. No es la primera vez que pasa esto y otras veces lo hemos hecho bien. Estamos los primeros y queremos seguir estando ahí", aseveró.
Además, sobre las derrotas, cree que llegaron por no saber cerrar los partidos, ya que como el del Levante, algunos los iniciaron con ventaja en el marcador. "Es verdad que hemos estado bien en algunos de ellos, otros se escaparon de una manera increíble por no cerrar los partidos. Lo anormal es que le saques tantos puntos al segundo y al tercero. Lo normal es que las Ligas sean igualadas", aportó.
En este sentido, destacó en negativo que hayan sumado ya tres derrotas. "Los equipos de arriba hemos perdido más puntos. Por lo menos es nuestro caso. Se nos han escapado puntos, hemos perdido ya tres partidos y son los que perdimos el año pasado en la temporada. Y este año los hemos perdido en poquísimas jornadas", lamentó.
Pese a perder en Valencia y no pasar del empate ante el Slavia el martes, dio descanso a los jugadores el miércoles y el jueves en una decisión criticada por algunos medios. "Con dos entrenamientos preparamos el Slavia porque no teníamos más. Viene siendo habitual el tener dos sesiones para preparar cada partido. No hay más. Hay siete días y dos días son de partido, otros dos de preparación y otro de recuperación, siete. No da para más", asestó.
Y tranquilo se mostró también al ser preguntado por si le preocupaba su continuidad en el banquillo debido a la 'mala racha'. "No", asestó antes de explicar que se siente bien respaldado en el club por la Junta Directiva. "En los últimos días estuvimos comiendo con el presidente. Me siento respetado y apoyado aquí y no hay ningún problema con esto", aseguró.
Sobre el Celta de Vigo, en descenso y con cambio de entrenador, con la llegada del exblaugrana Óscar García Junyent al banquillo, aseguró que acabarán saliendo de la zona roja. "Están en una situación difícil, se han metido abajo. En los últimos partidos les hizo daño el gol a última hora del Betis, en un partido bien jugado, y en Getafe tuvieron ese nerviosismo por la situación", comentó. "Pero tienen buenos jugadores, no es normal que lleven tan pocos goles con Aspas, Rafinha, Denis, Mina... A la larga van a salir de ahí, les falta recuperar ese punto de confianza para mostrar el talento que tienen, son un gran equipo creo yo", se sinceró.
Sin problema entre Messi y Griezmann
Sin duda, la respuesta más larga de Valverde fue a la pregunta de si había problema alguno entre Messi y Griezmann, por su falta de entendimiento futbolístico. "Se habla mucho de eso y tengo la sensación de que todo es mucho más sencillo de lo que parece. Griezmann está acostumbrado a un juego muy diferente al nuestro; cualquier desmarque, el balón se lo iban a lanzar. En nuestro caso es diferente, maduramos más la jugada", explicó.
"Es más complicado el momento en que el jugador te ve y tú haces el desmarque. Pero es generosos, siempre está ahí. Y cuando corres y no te la das, tienes que recuperar la posición. Son estilos diferentes y se tiene que acostumbrar a encontrar el momento justo para hacerlo. A Neymar también le costó el primer año", relativizó en este sentido.