El 4 de junio de 2017 el Mallorca consumaba su descenso a la Segunda División B. Era la crónica de una muerte anunciada, después de cuatro años deambulando por la categoría de plata. Ni el más optimista de la isla pensó aquella noche que en apenas dos temporadas los bermellones volverían a estar en Primera División. Que dos años y cuatro meses después se enfrentarían al Real Madrid…
Aquel verano de 2017 se consiguió lo que entonces parecía imposible, y que ha resultado la base para obrar el milagro: el Mallorca se hizo con un técnico, Vicente Moreno, que venía de brillar en Segunda División, y se configuró un equipo con futbolistas cuyas cualidades eran muy superiores al nivel de la competición a la que iban a enfrentarse.
Uno de los grandes protagonistas, sorprendente protagonista, ha sido Salva Sevilla (Berja, Almería, 18 de marzo de 1984). Porque su fichaje, el fichaje de un futbolista que estaba en Primera División por un club de Segunda B, sorprendió a todos. Pero Salva Sevilla demostró desde el principio que no se equivocaba.
Pregunta: Más de uno le diría que estaba loco aceptando la propuesta del Mallorca
Salva Sevilla: La verdad es que sí. Muchos me lo dijeron. Venía del Espanyol de Primera División y de repente iba a jugar en un equipo de Segunda B... No era fácil bajar dos categorías. Pero lo tuve claro desde el primer momento. Era una apuesta arriesgada, un proyecto ambicioso pero muy complicado, que podría haber salido mal… pero mi cabeza me decía que quería vivir esta experiencia. Quería sentirme importante como futbolista, y aquí me lo ofrecieron. Vinimos con todas las consecuencias, y la verdad es que ha salido a la perfección. El tiempo nos ha dado la razón. Y es una satisfacción enorme.
¿Esperaba, en septiembre de hace dos años, cuando jugaba en Segunda B, enfrentarse en unos días al Real Madrid?
Sinceramente, no. En aquel momento todo esto quedaba muy lejano. Es cierto que había un gran proyecto en el club, con el objetivo de lograr lo que hemos conseguido, pero creo que nadie esperaba que fuera tan pronto.
¿Cuál ha sido el secreto para conseguir un hito que parecía casi imposible?
Lo más importante es el trabajo, eso está claro. Nadie nos ha regalado nada, lo hemos conseguido por méritos propios. Pero eso es innegociable. Así que quizá el secreto radique en la perfecta comunión que se ha conseguido entre todos los sectores que forman el Mallorca. La afición, el club, el cuerpo técnico, la plantilla…
La afición se volcó completamente con el equipo en unos momentos que no eran para nada sencillos. La gente demostró que quiere mucho a su Mallorca, y que no lo iban a dejar caer. Nosotros, los jugadores, hemos sido muy pacientes a pesar de la euforia que nos rodeaba en todos estos meses. Hemos sabido en todo momento mantener la calma y afrontar la situación a corto plazo que se nos presentaba. Empezando por el primer ascenso, que quizáfue lo más importante, porque ahí el club se jugaba su futuro. El Mallorca no podía permitirse no estar en el fútbol profesional…
¿Y qué me dice del entrenador?
Vicente Moreno es un fenómeno. Desde que le conocí sabía que iba a entrenar pronto en Primera. Sólo pensé que ojalá fuera con el Mallorca…y así ha sido. Es un entrenador muy metódico, que vive por y para el fútbol, cuida todos los detalles, todas las jugadas… y eso hace que salgamos al campo sabiendo en todo momento lo que hay que hacer. Seguro que conseguirá lo que quiera, y hará una larga carrera en Primera, porque lo tiene todo para ello.
Es lo que te decía, entre todos, entrenador, plantilla, club y afición, hemos creado una perfecta comunión, cada uno ha hecho su parcela de trabajo, y a la vista está que ha dado resultado. Hemos conseguido algo que muy pocos equipos han conseguido en la historia.
Y eso se refleja también en el hecho de que ahora en Primera cada jornada hay 6-7 futbolistas que ya estaban en Segunda B.
Sí, en Segunda B construimos un gran bloque sobre el que se cimentó el ascenso, y que continuó dando resultados en Segunda. Se hizo algún refuerzo que aportó mucho para lograr otro ascenso. Pero la base se mantuvo, y eso es muy importante. Llevamos mucho tiempo juntos, sabemos a lo que jugamos, sabemos a la perfección lo que quiere el míster. Con una mirada ya nos entendemos todos… Pero también ha llegado gente nueva que seguro aportará mucho en este año para conseguir todos juntos la salvación.
"No hay que meter más presión a Kubo"
Kubo es uno de esos futbolistas que deben aportar mucho este año…
Es uno de ellos, sí. Le necesitaremos, seguro. Lo cierto es que tiene un enorme potencial, unas cualidades enormes…. pero también hay que tener en cuenta que es muy joven, que acaba de comenzar, y que tiene mucho por recorrer. Todo lo que hace tiene
mucho revuelo. Hay que estar tranquilo, apoyarle, mimarle, y no meterle más presión de la que ya tiene porque al final le puede jugar en su contra.
No parece, desde fuera, que se deje superar por la presión…
Él es muy humilde. Muy trabajador. Y está con muchas ganas de aprender, de mejorar, y eso en un futbolista tan joven y tan talentoso como él es vital. Seguro que nos va a dar mucho esta temporada, porque viene con esa predisposición. Espero que pronto pueda jugar en el Madrid, porque eso significará que lo ha hecho muy bien con nosotros. Y eso es lo que deseamos todos.
"Queremos sumar ante el Madrid"
Hablando del Real Madrid… ¿puede el Mallorca ganarle este fin de semana?
Claro que puede. Es muy difícil, muchísimo. Son los mejores jugadores del mundo. Pero esto es fútbol, y nosotros también somos de Primera División. Intentaremos ponerle las cosas difíciles y, por qué no, sumar puntos.
Usted, de hecho, ya sabe lo que es ganarle al Real Madrid…
Sí, le ganamos con el Betis 1-0 hace ya unos años. ¿Por qué no vamos a poder repetir este sábado ante nuestra gente?
¿Qué tiene que hacer el Mallorca para conseguirlo?
Sabiendo que es muy complicado, porque tienen muy pocos puntos débiles, deberemos ser muy solidarios en tareas defensivas, trabajar todos al máximo, y esperar que no tengan su mejor día.
Durante esta temporada ya ha habido partidos en los que se ha visto a un Real Madrid que ‘no tiene su mejor día’…
Pues ojalá se dé así el sábado. Es verdad que vienen después del parón, con mucha gente fuera, mientras nosotros estamos casi todos para preparar el partido… y quizá eso les pueda afectar.
Y el partido es además justo antes de que se midan al Barcelona.
A ver si entre todos esos detalles, y el calor de Mallorca, llegan al partido un poco despistados… Pero lo cierto es que va a ser muy, muy complicado. Porque son tan buenos que aun no haciendo su mejor partido te pueden matar en cualquier momento. Así que tenemos que hacer nuestro partido, trabajar muchísimo, ser muy solidarios, dar nuestra mejor versión, y tener un poco de suerte.
"Nosotros nunca hemos tenido dudas"
Una suerte que parecía un poco esquiva en este arranque de temporada. Menos mal de la victoria en el último partido…
Es que es muy difícil ganar partidos en Primera División. Ganar al Espanyol era muy importante. Terminamos con esa sensación extraña de no saber qué hacer para ganar un partido. Eso también nos ha venido bien para el parón, porque no es lo mismo afrontarlo con una derrota más, que hacerlo después de conseguir la victoria.
¿Qué sintió al marcar un gol al Espanyol cuatro años después de su último gol en Primera?
Fue una sensación maravillosa. Pero sobre todo porque significaba el 2 a 0, el gol que nos daba ya tranquilidad para afrontar el tramo final del encuentro, en un momento en el que nos encontrábamos necesitados de victorias.
Llegaron a surgir dudas…
El fútbol es muy resultadista. Pero lo cierto es que nosotros nunca tuvimos dudas. Sabíamos que estábamos haciendo las cosas bien. Que corrigiendo algunos detalles y cambiando un poco la fortuna íbamos a conseguir esos 3 puntos. Creo que se ha sido un poco injusto en algunos momentos, pero así es el fútbol, ya lo sabemos. Cuando no consigues resultados eres muy malo, y cuando los consigues eres el mejor. Somos profesionales, tenemos que convivir con este tipo de cosas.
Pero parece increíble que se dude de un equipo que viene de donde viene.
Desde dentro no lo entiendo. Pero esto forma parte del fútbol. Hay un trabajo detrás que a veces por ciertos detalles o porque hay un rival que también juega pues no sale, y no se valora ese trabajo. Pero creo que aquí en Mallorca la afición valora el trabajo que hace el equipo, está con nosotros, hemos perdido partidos y la gente se queda aplaudiendo, porque ven que hemos trabajado, que lo hemos intentado, que lo hemos luchado…
¿Se siente querido en Mallorca?
Muchísimo. Desde el primer momento aquí me he sentido muy bien tratado y muy valorado. La afición mallorquinista me ha hecho sentir muy especial, y eso para mí es vital para que las cosas salgan bien. Y quizá por eso me ha salido muy bien todo desde el principio. Quiero seguir esta línea. Quiero seguir aportando el máximo al equipo, trabajando al máximo, porque al final el beneficiado de todo esto es el Mallorca.
Eso quiere decir que hay Salva Sevilla para rato…
Ojalá. Ya tengo 35 años, es verdad, pero siempre me he cuidado mucho porque el fútbol me apasiona. Con esta edad hay que ir pasito a pasito. Ahora mismo me encuentro muy bien. Físicamente, y psicológicamente. El año que viene ya veremos cómo estaré… pero ahora me siento en plena forma. Cuando la cabeza te dice que quieres jugar, que disfrutas jugando, yo creo que tienes que seguir adelante.
¿Con el Mallorca en Primera División?
Yo confío al 100% que así será, en que lo conseguiremos. Sería muy importante para todos, para el club, para la afición, para la ciudad, y también para los jugadores. Lo que hemos conseguido en estos dos años no ha sido fácil, y queremos mantenerlo. No lo vamos a entregar de cualquier manera. Cada partido va a ser una lucha por sumar puntos.
La siguiente lucha es contra un gigante…
Sin duda. Pero queremos sumar los 3 puntos. Sabiendo que es muy difícil, que vamos a tener que sufrir muchísimo, creo que se puede conseguir. El 1-0 me vale. Y tres puntos más cerca de la salvación…