Otra vez, el Real Madrid mostrando una triste imagen. En su penúltimo partido de la temporada, los blancos, que jugaron toda la segunda parte con diez por la expulsión de Vallejo, han hincado la rodilla ante una Real Sociedad que, con esta victoria (3-1), mantiene sus opciones de terminar en séptima posición y jugar el próximo curso en la Europa League. El cuadro txuri-urdin, de fiesta en Anoeta para aclamar a su equipo femenino tras la reciente conquista de la Copa de la Reina en Granada ante el Atlético de Madrid, fue superior a los blancos en todo. En táctica, en presión, en calidad y especialmente en ganas, mostrando las carencias de un rival que ya está pensando en la próxima campaña, en cómo rehacer el equipo, más que en otras cosas.
Se adelantaron los de Zidane en San Sebastián con un golazo de Brahim Díaz, que está siendo una de las notas positivas del Madrid en este final de curso, pero la Real tiró de orgullo para acabar empatando, por medio de Mikel Merino, y posteriormente remontar el partido al aprovechar su superioridad numérica tras la expulsión de Jesús Vallejo antes del descanso. El central aragonés vio la roja directa por interceptar un balón con la mano dentro del área. Penalti que señaló Martínez Munuera y, aunque Courtois le adivinó las intenciones a Willian José, los realistas acabarían imponiéndose en la segunda parte con los tantos de Zaldua y el jovencísimo Barrenetxea. Pudo haber sido más holgada la ventaja del equipo vasco, pero la madera, al repeler un zurdazo de Januzaj al larguero, lo evitó. Con este triunfo, la Real suma 50 puntos y sigue a tres de la séptima plaza que aún ocupa el Athletic de Bilbao.
El Madrid, con Bale nuevamente fuera de la convocatoria —en un nuevo rejonazo de Zidane al galés—, empezó enchufado en Anoeta y en su primera opción seria de ataque lograría adelantarse en el marcador con una conducción espectacular de Brahim Díaz, que se fue de cuantos jugadores salían a su paso para batir por bajo con calidad a Rulli, firmando así su primer gol con la camiseta del Real Madrid.
Pero la Real no tardó en despertarse y lo hizo con el protagonismo de un millenial como Barrenetxea, que comenzó a dejar pinceladas de la calidad que atesora, el lateral izquierdo Aihen Muñoz y Mikel Oyarzabal, que entraba en juego para generar el mayor peligro de su equipo en la primera parte. Fue precisamente Oyarzabal el protagonista de un gol de la Real que no subió al marcador por fuera de juego. El VAR lo revisó detenidamente y acabaría invalidando la acción después de unos cuantos segundos de incertidumbre. Una jugada que fue el preludio del empate, en una acción iniciada por Barrenetxea. El balón llegó a un Willian José que asistió de tacón a Oyarzabal para que el internacional español consiguiera un gran tanto, consolidándose como el máximo realizador de la Real con 14 dianas.
El Real Madrid salió de su letargo y se fue a por el segundo gol con el que volver a ponerse por delante: primero lo intentó Benzema con un remate cruzado desde fuera del área y luego Isco, que nuevamente estuvo bastante desacertado, la tuvo en un mano a mano con Rulli, pero el meta argentino tiró de reflejos para evitar el 1-2. En un continuo toma y daca, fue la Real la que pudo haber firmado el tanto de la remontada poco después y justo antes del descanso. Vallejo, dentro del área, desvió con la mano un remate de Willian José y el árbitro Martínez Munuera no se lo pensó: penalti claro y roja para el central madridista. Sin embargo, el delantero brasileño de la Real lanzó muy mal, al centro de la portería, y Courtois, que se quedó fijo en su sitio, salvó los muebles para el Madrid. Con el 1-1 se llegó al descanso, pero con ventaja numérica para los locales.
Y la Real no tardó en aprovechar esa superioridad para golpear en una segunda parte sin color, con un Real Madrid roto y totalmente entregado. Zubeldia tuvo el segundo con un disparo lejano al que respondió de maravilla Courtois y luego un remate posterior de Mikel Merino rozó el poste. El 2-1 estaba al caer, y acabaría llegando en el 57' con un centro de Rubén Pardo que buscó la cabeza de Zaldua. Éste remató a mucho distancia de la portería de Courtois, que resbaló, y el balón fue cogiendo un efecto sorprendente hasta alojarse en la red.
Fue la claudicación definitiva de un Real Madrid que, con uno menos, terminó por arrojar la toalla. La Real estaba como quería y, diez minutos después, logró el tercer gol en otra gran combinación de su ataque: Oyarzabal remató la pelota al palo y el rechace posterior lo aprovechó Barrenetxea, que puso la guinda a su gran partido, para batir a un Courtois que quizás pudo hacer algo más. El partido estaba sentenciado. Zidane dio entonces minutos a Modric, Lucas Vázquez y Vinícius, aunque el brasileño poco pudo hacer con todo el pescado ya vendido. La Real terminó por desnudar a un triste Real Madrid, pese a su inferioridad numérica, y firmar una victoria que le permite seguir soñando con Europa.
Ficha técnica
Real Sociedad, 3: Rulli; Zaldua (Januzaj, m.68), Moreno, Llorente, Muñoz; Rubén Pardo (Illarramendi, m.77), Zubeldia, Merino; Barrenetxea (Juanmi, m.85), Oyarzabal y Willian José
Real Madrid, 1: Courtois; Carvajal, Nacho, Vallejo, Marcelo; Casemiro, Kroos, Isco (Modric, m.56); Asensio (Vinícius, m.76), Brahim Díaz (Lucas Vázquez, m.65) y Benzema
Goles: 0-1, m.5: Brahim; 1-1, m.25: Mikel Merino; 2-1, m.57: Zaldua; 3-1, m.67: Barrenetxea
Árbitro: Martínez Munuera (Comité valenciano). Expulsó en el minuto 38 con tarjeta roja directa a Vallejo. Amonestó a Carvajal y Casemiro, del Real Madrid; y a Zubeldia, de la Real Sociedad
Incidencias: Partido de la trigésimo séptima jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio de Anoeta ante 27.322 espectadores. Las jugadoras de la Real Sociedad, campeonas de la Copa de la Reina, ofrecieron previo al inicio del partido a la afición txuri-urdin el trofeo conseguido en Granada.