Santiago Solari se la juega en Pilsen. Este miércoles, el Real Madrid se medirá al Viktoria Pilsen en el Doosan Arena. Un duelo que a priori debería ser casi de trámite para el trece veces campeón de Europa, aunque teniendo en cuenta cómo está actualmente el patio en la casa blanca y que los checos ya vendieron cara su derrota hace dos semanas en el Santiago Bernabéu (2-1), en el penúltimo encuentro de Julen Lopetegui en el banquillo blanco tras ser destituido hace una semana por la Junta Directiva del Real Madrid.
De momento, con Solari en el banquillo, el conjunto blanco suma dos victorias, contra el Melilla en la Copa del Rey (0-4) y frente al Valladolid en Liga (2-0), en un duelo que acabó contando con un gran protagonismo de Vinicius Júnior, un jugador que previamente había sido relegado al ostracismo por Lopetegui durante los casi cuatro meses que estuvo el técnico vasco en la entidad madridista.
Solari sigue entrenando al Madrid... de momento. No se sabe qué pasará esta semana en la casa blanca. Ésta es la realidad que vive el campeón de Europa. De momento, el técnico argentino, de 42 años, ha conseguido ganar tiempo en la semana que lleva al frente del primer equipo y le queda una más para tratar de convencer a la Junta que preside Florentino Pérez de que puede hacerse cargo del equipo, pese a que sus números en el Castilla no invitan demasiado al optimismo (en los 85 partidos que ha dirigido al filial blanco, el rosarino presenta un balance de 32 triunfos, 29 empates y 24 tropiezos).
Y es que el plazo máximo que marca la Federación Española de Fútbol (RFEF) para ocupar un banquillo de forma interina es de dos semanas, como puede leerse en el artículo 60 del Reglamento General de la RFEF, dentro del Capítulo I. Los entrenadores del Título III. De los técnicos y sus licencias. Después de la destitución de Lopetegui y el nombramiento de Solari como técnico provisional, el Madrid quiere dar una oportunidad al argentino, que de momento tiene otra gran prueba de fuego en la República Checa, en un partido que contará con el arbitraje del polémico colegiado alemán Denis Aytekin —el mismo que dirigió la remontada del Barcelona contra el PSG en Champions (6-1)—.
Hace una semana, cuando destituyó a Lopetegui, la idea del Madrid era anunciar el despido del técnico vasco como la contratación de su sucesor. Lo primero sí lo hizo, pero lo segundo se le resistió. Florentino Pérez quería a Antonio Conte: el técnico italiano lo tenía todo de cara para convertirse en el nuevo entrenador del actual campeón de Europa, pero sus exigencias contractuales —quería un contrato de larga duración— le hicieron desistir.
Ahora Solari, que fue jugador del Madrid de los galácticos entre 2000 y 2005 tras llegar procedente del Atlético de Madrid, tiene ante sí una oportunidad de oro para convertirse definitivamente en el jefe del banquillo blanco. Quiere revertir la situación de un equipo que todavía sigue a la deriva. Si el Real vence y convence el miércoles en Pilsen, lo más probable es que se quede definitivamente en el primer equipo y no regrese a un Castilla que en estos partidos está siendo dirigido por Manolo Díaz. Y entonces, ya como capitán de la nave blanca, el club lo anunciaría como entrenador definitivo del primer equipo el jueves o el viernes de esta semana.
Pero de momento son todo especulaciones y hay que esperar a ver qué ocurre este miércoles en el Doosan Arena...