Con el final de mercado de fichajes en verano y las plantillas cerradas para las competiciones de este curso, se produce un hecho insólito desde hace 11 años en el Real Madrid: Jorge Mendes no contará con ningún futbolista representado en la casa blanca.
Así es. Más de una década después el multimillonario agente no cuenta con ningún jugador entre su agenda de representados que vista la camiseta blanca. Jorge Mendes se había convertido en una de las caras más habituales en el Palco del Bernabéu, y es que su relación con el Madrid, comenzó en 2007, cuando Ramón Calderón aún ostentaba el cargo de presidente y decidió traer a un joven defensa portugués que militaba en el FC Porto: Pepe.
Tras él fueron múltiples los jugadores que interesaron a la cúpula merengue. La mayoría comenzaban a despuntar como los casos de Di María, cuando aterrizó desde el Benfica, Coentrao, procedente del mismo equipo, o Fabinho, que llegó a disputar algunos minutos con el primer equipo cuando Mourinho era el técnico. Carvalho también vistió la elástica blanca, pero este sí, con mucha más experiencia a sus espaldas.
El movimiento de Cristiano Ronaldo cuando abandonó el Manchester United lo encumbró a lo más alto del negocio de representación. Su cliente estrella le reportó unos beneficios nunca antes vistos. Ahora con su salida, se han vuelto a repetir esos ingresos, pero eso sí, a cambio ha cortado todos los vínculos que tenía con el club. Las últimas declaraciones tirando por los suelos el premio a mejor jugador UEFA de Modric y las formas con las que acabó abandonando el club Cristiano han enfriado mucho las relaciones.
Fabio Coentrao ha sido el último en salir del Madrid. James aún tiene contrato vigente, de momento juega en calidad de cedido con el Bayern de Múnich. El colombiano tiene intención de regresar a casa, pero aún deberán pasar varios años para que eso suceda –por lo menos hasta 2021– y que los muniqueses no ejecuten la opción de compra.
Gestifute, su empresa
Los tentáculos de Gestifute se han visto paulatinamente cortados con el paso del tiempo. En otro tiempo el Real Madrid mostró interés en hacerse con el servicio de varios futbolistas representados por Mendes: Falcao, que no llegó, o De Gea con el ya famoso fax. Además, cuando aterrizó Mourinho en el Bernabéu, ostentaba los dos pilares más valiosos del vestuario, su estrella y su entrenador. Ahí fue cuando más lejos llegó su influencia. "Mendes lo que quiere ser es presidente del Real Madrid", se escuchaba en la cúpula del club.
Cuando Zidane dio el bombazo anunciando que abandonaba su puesto, Villas-Boas (representado por Mendes) fue inmediatamente relacionado con el Real Madrid, pero la planta noble del Bernabéu se decantó por Lopetegui, tratando de sanear su relación con Mendes.
El último gran servicio que prestó el luso fue con la operación de James desde el Mónaco en 2014, tras el gran Mundial que realizó. Ahora bien, si un jugador suyo encaja con las exigencias de la plantilla, no dudarán en ponerse en contacto con Mendes.