Karim Benzema se sincera en Vanity Fair. El delantero galo ha concedido una intensa entrevista a la revista en la que trata temas deportivos y de su vida personal.
Benzema, que lo pasó muy mal por el caso Valbuena, nunca olvidará el gesto que tuvo Florentino Pérez con él: "Después de pasar un día en la cárcel regresé muy triste. Florentino Pérez me esperó en Valdebebas y me dio todo su cariño. Está conmigo en los buenos y malos momentos, es como de mi familia".
Reconoce Karim que su vida personal no era la mejor y que tuvo que cambiar: "A los 23 años vi que o era más disciplinado o me volvía a Francia. Tuve que cortarme mucho con la comida. Dejar de comer todo lo que quiero es el mayor sacrificio que he hecho".
Sobre las críticas que recibe, Benzema afirma que ni le van ni le vienen: "Si hago un partido malo, no necesito leer la prensa para saberlo. Juego para ayudar a mis compañeros y para ganarlo todo, me da igual que mi nombre esté en los periódicos, eso no significa nada. A los grandes jugadores siempre nos critican, vendemos periódicos".
Por último, Benzema dejó una frase que causará un gran revuelo en Francia. Cuando le preguntaron por el himno de su país y por qué ya no lo cantaba antes de los partidos –cuando aún iba con los Blues–, Karim no se mordió la lengua: "Si escuchamos bien la Marsellesa, llama a ir a la guerra y a mí eso no me gusta".