Xavi Hernández, exjugador del FC Barcelona que actualmente milita en el Al Sadd de Qatar, ya ha votado en las elecciones catalanas, que se celebrarán este jueves.
Lo hizo vestido con un polo amarillo, en un claro guiño al independentismo, pues este es el color que se ha usado —con lazos— para pedir la liberación de Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, actualmente en prisión.
"Voté de amarillo aposta", reconoce ahora Xavi, dos días después, en una entrevista al programa Tot Costa (Todavía Cuesta) de Catalunya Radio."Que en un país democrático haya presos políticos me parece muy fuerte. Voté de amarillo aposta. Aquí las casualidades no valen, lo hice porque quise. Si dijera lo contrario, sería un hipócrita. Siempre he sido partidario de hacer cosas por el país. Quiero que haya un referéndum, que la gente haga la suya", ha dicho el jugador de Tarrasa en la víspera de las elecciones catalanas y a tres días del Clásico que Real Madrid y Barcelona disputarán el sábado en el Santiago Bernabéu.
Sobre la posibilidad de jugar hasta los 40 años, Xavi, que cumplirá los 38 el próximo 25 de enero, responde: "Me encuentro bien físicamente. Tengo la suerte de no tener lesiones. Estoy disfrutando del fútbol.Todavía no sé si seguir o no. En junio acabo contrato y decidiré entonces qué es lo que hago". "En marzo empezaré a ver cómo van las cosas, dependerá también de cómo nos va en la Champions asiática. Después de jugar, sé que me pondré a entrenar", afirma.
En este sentido, al centrocampista se le preguntaba por la posibilidad de entrenar al Barça algún día, a lo que él contestaba: "Necesito quemar etapas. No creo que esté preparado para entrenar al Barça ahora. El Barça es como una etapa final. A largo plazo, me gustaría entrenar allí, claro. Pero no creo que dirija a ninguno de mis excompañeros".