El miedo escénico de Gareth Bale
El delantero galés no supera el miedo a volver a lesionarse. Ante el Fuenlabrada pidió a Zidane no jugar de titular.
El expediente X Gareth Bale sigue su curso. El galés se quedó fuera de la convocatoria ante el Borussia Dortmund. ¿El motivo? Su miedo escénico a lesionarse.
Bale no aparece en el parte médico del Real Madrid desde el 10 de noviembre.
Nuestro jugador Gareth Bale, que sintió unas molestias en su pierna izquierda al término del entrenamiento del pasado jueves, ha sido sometido hoy a diferentes pruebas por los Servicios Médicos Real Madrid Sanitas. Se le ha diagnosticado una rotura fibrilar en el tercio medio del músculo aductor largo de la mencionada pierna. Pendiente de evolución.
Los galenos merengues no ven lesión alguna en Gareth. Sin embargo, Bale también se perderá el trascendental partido de este sábado ante el Sevilla (Santiago Bernabéu 16:15). Dicen, fuentes internas, que estará disponible en el Mundial de Clubes que se juega el fin de semana del 16 y 17 de diciembre.
Pidió no ser titular ante el Fuenlabrada
Hay una información relevante que explica lo que le puede estar pasado el bueno de Bale. La semana previa al partido de vuelta de los 1/16 de final de la Copa del Rey ante el Fuenlabrada, Gareth destapó el tarro de las esencias durante los entrenamientos.
Según ha podido saber Libertad Digital y esRadio, Zidane había decidido darle la titularidad. Sin embargo, en las horas previas al partido ante el conjunto fuenlabreño, Bale se reúne con Zizu y le pide no salir de inicio. "Dame media hora mister". Dicho y hecho. Gareth sale desde el banquillo, es clave en los dos goles del conjunto merengue y las sensaciones que deja son notables. Nada más lejos de la realidad. Tras el encuentro, dice sentir molestias en el sóleo. Vuelven los fantasmas.
Bale, que lleva cinco lesiones en 2017 y solo ha jugado 21 partidos este año, ha estado de baja 308 días desde que llegó a la Casa Blanca. Se ha perdido casi la mitad de los partidos que el Madrid ha jugado desde su fichaje en verano de 2013. La presión, como bien dice otro británico cuyo caso recuerda algo al de Bale, Jonathan Woodgate -excelente central al que las lesiones musculares arruinaron su carrera-, es un horrible enemigo:
Se cómo se siente Bale. Te sientes muy solo cuando estás lesionado. Sólo estás tú. Tú eres el que está herido y todos los demás hablan y hablan. Bla, bla, bla... Y tú estás lesionado. No hay nada peor que estar lesionado. Especialmente siendo Gareth, él está en España y juega para el mejor equipo del mundo, hay mucha presión. Y más cuando han pagado 100 millones por ti...
Además del sóleo, a Gareth le duele la cabeza. Ese extraño elemento que, en ocasiones, juega un papel fundamental en muchas lesiones. Y en este caso, desgraciadamente, no se cura tomando un Ibuprofeno. El miedo a una nueva lesión, duele y mucho, a Gareth Bale.
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