Si el Real Madrid jugara así todos los partidos, no sería líder de la Liga. No estaría en puestos de Champions y es posible que hasta estuviera peleando por evitar los puestos de descenso. Es difícil jugar peor que como lo hicieron ante el Alavés, sobre todo en la segunda mitad. Por momentos, hubo pitos de una afición que veía peligrar la victoria y cómo su equipo era claramente inferior. ¿La única y determinante diferencia? La calidad de ambas plantillas. Mientras Isco marcaba el 2 a 0 en el primer disparo del Madrid en la segunda parte –minuto 86– el Alavés mandaba al limbo cinco ocasiones claras entre ellas un disparo de Edgar, sin oposición, en el área pequeña. El resultado es altamente engañoso.
El Real Madrid nunca dio muestras de ser superior al Alavés. Nunca estuvieron cómodos, no se soltaron la melena y, aunque se fueron contentos por el resultado, por la victoria, la evaluación futbolística es negativa. Fue un partido extraño desde el principio. Fue tan rara la tarde que Modric, con toda su calidad, fue el peor de los suyos.
Zidane apostó por la BBC pese a que no estaba Casemiro y el equipo fue notando, en negativo, esta mala combinación a medida que pasaban los minutos. Poco a poco, el Alavés fue encontrando valiosos huecos ante la pasividad de los delanteros para defender y el excesivo esfuerzo que debían realizar en defensa, Isco, Modric y Kroos, tres mediapuntas.
A los 10 minutos, se produjo la lesión de Varane que reaparecía tras lesionarse en Mestalla. Malas noticias porque en una semana se miden al Atlético de Madrid y en semana y media al Bayern de Munich. Sin embargo, su lesión sería determinante esta tarde. Dani Carvajal entró al terreno de juego y como Danilo, sí, Danilo, fueron los jugadores más peligrosos en ataque. En el caso del español, fue resolutivo porque de sus botas salió el 1 a 0. Una pared con Benzema, terminó en la asistencia de Dani hacía atrás que remató el francés con un buen disparo con la zurda a la media hora de partido. Gol que no debió subir al marcador. Benzema estaba en fuera de juego cuando recibió el primer pase de Carvajal.
Fue el primer disparo a puerta del Real Madrid. Hasta entonces, sólo algún pequeño chispazo. Un robo de listo de Ronaldo, regates de Isco y un disparo de Benzema a la grada. En la primera parte, sin llegar a sufrir, el Madrid sólo hizo un par de jugadas combinativas de cierta creatividad. Sobre todo funcionó el eje Isco-Benzema-Ronaldo. Bale estuvo casi desaparecido pero aun así, tuvo el 2 a 0 en sus botas. Una pared entre Ronaldo y Danilo terminó en un disparo excesivamente cruzado de Bale, que eso sí, sufrió un penalti claro. Otro error de Sánchez Martínez. El Alavés, con defensa de cinco, le faltó pararse un poco cuando tenía el balón. Todo su arsenal ofensivo se basaba en la velocidad y ahí, salvo cuando aparecía Theo con una maravilla de zancada, el Madrid demostró estar bien.
La primera parte fue aburrida. La segunda sí tuvo emoción. Los dos equipos pusieron de su parte para que así fuera. El Real Madrid, sin poder dar cinco pases seguidos, y el Alavés siendo valiente, presionando arriba y poniendo contra las cuerdas al líder de primera. Era el clásico partido en el que el Madrid baja el ritmo tras ponerse por delante en el marcador y acaban sufriendo. El clásico partido de esta temporada porque el 85% de los equipos que visitan el Bernabéu tienen opciones de sumar algún punto en el último hora de partido.
El Alavés tuvo, hasta el gol de Isco, cinco ocasiones de gol por una del Real Madrid. Pero no eran sólo los disparos, eran las aproximaciones al área rival, eran las sensaciones y ahí goleaban los vitorianos. Edgar pudo culminar todo ese trabajo con un disparo del que se va a acordar todo el viaje de vuelta. Fue el antes y después para Zidane que empezó a mover el banquillo. Lo hizo tarde pero acertadamente. Quitó a Modric y Benzema para dar entrada a Kovacic y Lucas Vázquez. Es posible que se mereciera más el cambio Bale pero lo que estaba claro es que la BBC no podía continuar un minuto más. Quizá ante el Atlético o Bayern se pongan el mono de trabajo pero ante el Leganés, tiene más pinta de que van a pedir una caipiriña en vez de un pico cuando el Madrid no tenga la pelota.
El Alavés perdonó y no así el Real Madrid. La calidad. En el 85' Ronaldo dio un buen pase a Isco y el malagueño, casi sin ángulo, se sacó un disparo fuerte y seco que dio en la parte superior de la red. Imparable. Para rematar el dudoso marcador, cinco minutos después, una falta de Bale que dio en el travesaño fue rematada a gol por Nacho en el rechace.
Buen partido de Benzema, por momentos, de Isco, por momentos, buen partido de Carvajal y Danilo, pero mal partido del Real Madrid en conjunto que es lo más importante. Mucho tendrá que subir el nivel para salir glorioso de este tremendo mes de abril que acaba de comenzar. Seguro que mejorarán pero es mejor hacerlo desde el primer partido. Y por último, Zidane dio descanso a Keylor para protegerle y el movimiento puede avivar más el debate. El tico está lejos del nivel que se le exige al portero del Madrid y Kiko estuvo, otra vez, formidable. Atento en las salidas fuera del área y muy seguro en todos los balones en el alto. El debate es lógico.
Ficha técnica:
Real Madrid, 3: Casilla; Danilo, Varane (Carvajal, m.10), Pepe, Nacho; Kroos, Modric (Kovacic, m.68), Isco; Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema (Lucas Vázquez, m.81).
Alavés, 0: Pacheco; Ely, Laguardia, Feddal, Theo; Manu García, Camarasa (Santos, m.83), Edgar (Katai, m.75), Toquero, Ibai (Romero, m.69) y Deyverson.
Goles: 1-0, m.31: Benzema. 2-0, m.85: Isco. 3-0, m.88: Nacho.
Árbitro: José María Sánchez Martínez (Comité Murciano). Amonestó a Ely y Manu García por el Alavés.
Incidencias: encuentro correspondiente a la 29a jornada de LaLiga Santander, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 76.875 espectadores. Se rindió homenaje a una leyenda del madridismo, Juanito, 25 años después de su fallecimiento.