El Barcelona ha ganado seis de las ocho últimas ligas. Dato que hubiera sido menos contundente si en los últimos 8 años, el Real Madrid hubiera mostrado la actitud, intensidad, unión y hambre que se ha visto desde la llegada de Zidane. Con el paso de los años, esta Liga acabará perdiéndose en el tiempo. No será eterna como las de Tenerife o la lograda por Fabio Capello en 1996, pero el madridismo no olvidará cómo el hombre de la Novena, Zidane, volvió a ilusionarles. Cómo un equipo que en enero daba auténtica pena, fue campeón durante 15 minutos en la última jornada. El Madrid compitió hasta el final como se le debe exigir.
Zidane ha sentado las bases de un proyecto que debe girar en torno a él, una figura respetada por el vestuario y por la afición. El francés, que hace meses entrenaba en Segunda División B, ha firmado la mejor vuelta en la historia de la Liga. Casi nada. Y con un equipo que salía del psicólogo. Lo ha conseguido sólo con entrenamientos, sin planificar una plantilla. Benítez se dejó 17 puntos en 17 jornadas. Zidane, 10 en 19 jornadas. Más mérito aún si recordamos que lo ha hecho con Benzema y su cinta de vídeo, con la policía detrás de James o las continuas lesiones de Bale que le han impedido utilizar a la BBC salvo en partidos puntuales. Es inevitable acordarse de Mourinho. "Zidane ha llegado tarde", dijo esta semana. Tenía razón.
El Madrid, enchufado desde el inicio
El partido en Riazor cumplió lo esperado. El Real Madrid salió enchufado, con la intención de meter presión al Barcelona desde el primer minuto. El Deportivo, que lleva pensando en la próxima temporada desde hace meses, no iba a cambiar tras conseguir la permanencia en Villareal. Un equipo superior y con ganas de ganar ante uno inferior y jugando por obligación. El resultado fue un 0-2 a los 25 minutos de partidos. Los dos tantos de Cristiano Ronaldo que en 45 minutos tuvo dos postes. Viendo que la Liga estaba complicada, que el pichichi era aún más difícil –necesitaba cuatro goles- y que había sufrido un pisotón, el portugués no salió tras el descanso.
Fue un partido que pudo ser histórico pero que no tuvo ninguna historia. El Madrid iba sobradísimo. Pudo batir récord de posesión porque manejaba el partido a su antojo. El 0- llegó en el minuto 7. Bale se fue fácil del cuarentón Manuel Pablo, pasó a Benzema y este a Ronaldo que sólo tuvo que empujarla. El segundo tanto tuvo a Kroos como asistente y a Cristiano rematando un córner que rechazó en Arribas. El segundo tanto de Luis Suárez se notó al instante. Fue un bajón para el Real Madrid que sin el siempre hambriento Ronaldo en el campo, bajó el ritmo del encuentro hasta convertir el partido en un hartazgo.
James, Isco y Jesé dieron descanso a Ronaldo, Bale y Kroos y los tres suplentes pudieron aumentar la ventaja. Quizá ni lo hubieran celebrado. Ya sabían que la Liga estaba perdida. Incluso Keylor Navas tuvo la oportunidad de sacar su magia con un auténtico paradón. El canterano Rober cabeceó en el área chica y, por intuición, el guardameta costarricense salvó un gol cantado y a bocajarro.
Es la Liga del Barcelona, la que ratifica a Luis Suárez como el gran delantero centro de Europa, pero la temporada no ha terminado. El 28 de mayo el Madrid tiene una cita con la historia que hoy le ha dado la espalda desde Granada.
Ficha técnica
Deportivo de La Coruña, 0: Pletikosa; Manuel Pablo, Arribas (Rober, m.70), Sidnei, Fernando Navarro; Mosquera (Celso Borges, m.76), Bergantiños; Fede Cartabia, Luis Alberto, Fayçal Fajr (Oriol Riera, m.76); y Lucas Pérez
Real Madrid, 2: Keylor Navas; Carvajal, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Casemiro, Kroos (Isco, m.61), Modric; Bale (Jesé, m.76), Cristiano Ronaldo (James, m.46) y Benzema
Goles: 0-1, m.7: Cristiano Ronaldo; 0-2, m.25: Cristiano Ronaldo
Árbitro: Mateu Lahoz (Colegio valenciano). Mostró tarjeta amarilla a Kroos (m.50), Ramos (m.86) y Modric (m.90), del Real Madrid; y a Mosquera (m.57), del Deportivo
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésimo octava y última jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio de Riazor ante 29.017 espectadores, según el Deportivo. Antes del encuentro se guardó un minuto de silencio en memoria de las víctimas del atentado de este viernes contra una peña del Real Madrid en Irak. En el descanso se homenajeó a Arsenio Iglesias, exentrenador del Deportivo de La Coruña y el Real Madrid