La hora del cierre vuelve a cobrarse una víctima en el fútbol español, como ya pasara en verano con David de Gea, cuando la llegada del portero del Manchester United se imposibilitó, a causa de una demora de veinte minutos en el alta del internacional, como nuevo jugador del Real Madrid.
El fichaje más caro de la historia del Eibar, Kike García, no podrá debutar con el equipo guipuzcoano antes del mes de julio, debido al retraso en la inscripción del jugador. Concretamente, a las 00:01 del día 2 de febrero, concluyó la operación. Todo indica a que el Middlesborugh, club de procedencia del jugador, envió tarde la documentación, lo que ha provocado una situación imprevista e incómoda en el equipo que dirige José Luis Mendilibar.
"Estamos orgullosos del fichaje, aunque tengo un gran disgusto por no haberse podido tramitar dentro del plazo. Había clubes que ofrecían tres veces más dinero del que ha pagado el Eibar, pero el futbolista y su mujer querían venir aquí", dijo en rueda de prensa Fran Garagarza, director deportivo del Eibar.
No obstante, no es la primera vez que este club tiene que afrontar una situación como esta. Hace justo un año, el presidente, Alex Aranzabal, tuvo que solicitar la cautelar (que finalmente fue denegada) al TAS debido a un problema administrativo en el traspaso de Rafa Páez, que llegaba cedido para la segunda vuelta y no pudo disputar ni un solo minuto.