Real Zaragoza y Unión Deportiva Las Palmas se juegan este domingo (19 horas peninsulares) la última plaza en la próxima Liga BBVA. Con 3-1 en la ida a favor del sorprendente equipo maño, el Estadio de Gran Canaria registrará un espectacular ambiente buscando la remontada de los amarillos, a los que ya se les escapó el ascenso a última hora en las dos campañas precedentes.
Por ese motivo, el técnico insular, Paco Herrera, ha pedido a los suyos actuar con "cabeza fría" y dejando "aparcados los sentimientos". Igualmente, ha remarcado la necesidad de "defender con más calidad" que en La Romareda, porque ha reconocido que fue "muy duro" que el Zaragoza, jugando como local, les hiciera daño al contragolpe en la segunda parte. En todo caso, el equipo grancanario seguirá siendo, en palabras de Herrera, fiel a su filosofía de toda la temporada. El entrenador admitió que el once con el que formará "se va a parecer mucho" al que jugó en Zaragoza, porque es un equipo que tiene "cara y ojos, sabe lo que quiere".
Por su parte, el equipo blanquillo llega al último duelo de la temporada convencido de lograr un ascenso que hace apenas una semana, con el 0-3 del Girona en la ida de la eliminatoria previa, parecía inalcanzable. En la rueda de prensa previa al partido, el preparador serbio del Zaragoza, Ranko Popovic, aseguró que ha llegado el momento para la entidad de olvidar "los sufrimientos" pasados, logrando el retorno a la máxima categoría del balompié nacional. En todo caso, Popovic se queda ya con el positivismo que rodea a su equipo en las últimas fechas, presumiento de haber "levantado el zaragocismo. Estos días he visto muchos chicos jóvenes con camisetas del Real Zaragoza en la calle y en todos los lados que no había visto en todo el año y eso es lo mejor que nos ha podido pasar", ha resaltado.
Igualmente, pese a ser consciente de la presión que imprimirá desde el principio el equipo local, el balcánico ha sido tajante y ambicioso al manifestar que el objetivo de los suyos es "imponernos desde el principio y llevar el partido como nos gusta a nosotros".
El partido, que será arbitrado por el colegiado rijojano Daniel Ocón Arráiz, ha sido declarado de alto riesgo, por lo que contará con el doble de seguridad privada que un partido normal, con unos 200 efectivos. Igualmente, la Policía Nacional movilizará a unos 155 agentes y la Policía Local, 34, con el refuerzo de 70 efectivos de Protección Civil y de voluntarios de la Cruz Roja. Tras los incidentes producidos en el último partido de la pasada campaña ante el Córdoba, la organización quiere evitar a toda costa cualquier tipo de incidente, sea con una celebración final de los locales o de los aragoneses.