El exgerente de Osasuna Ángel Vizcay, detenido junto al expresidente Miguel Archanco y el exdirectivo Txuma Peralta por la desaparición sin justificar de 3,7 millones de euros del club navarro, ha sido además quien ha destapado una supuesta trama para amañar encuentros la pasada temporada con el objetivo de que el equipo no descendiese a Segunda División.
Según ha desvelado el programa El larguero, Vizcay realizó una declaración grabada en vídeo ante la Liga de Fútbol Profesional en la que confesó el supuesto arreglo de algunos encuentros de las últimas campañas. En la declaración, desveló que se ofrecieron 150.000 euros al Valladolid por vencer al Deportivo de La Coruña y otros 150.000 euros al Betis por hacer lo propio ante el Celta de Vigo en la temporada 2012-13. Además, al Getafe le pagaron 400.000 euros por dejarse ganar en El Sadar (1-0) en una operación en la que implica a otros dos directivos, Tomás López y Juan Pascual.
En cuanto a la pasada temporada, Vizcay implica a los jugadores Antonio Amaya y Jordi Figueras como enlace para pagar 650.000 euros al Real Betis por ganar al Valladolid y dejarse perder ante Osasuna. Esa misma campaña, en la jornada 37, los jugadores del equipo navarro Puñal y Damiá se pusieron en contacto con el capitán del Espanyol Sergio García para ofrecer 250.000 euros por un empate en barcelona entre ambos conjuntos. El encuentro concluyó con empate a uno entre ambos conjuntos. En su testimonio, Vizcay aseguró tener conocimiento de una veintena de casos de una práctica que también llevó a cabo la directiva presidida por Patxi Izco.